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Bebés gemelos: Similares pero diferentes

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lunes, 16 de abril de 2012

Cómo decidir dónde dar a luz


Cuando quedó embarazada, que se encargó de elegir un proveedor de atención médica prenatal o equipo de profesionales que usted puede confiar para proporcionar el mejor cuidado para usted y su bebé durante el embarazo. A medida que el tiempo de la llegada del bebé se acerca, es posible que se enfrenta a otra decisión importante de la salud - en caso de dar a luz. Por ejemplo, usted puede estar trabajando con las parteras y prepararse para un parto en casa hasta que algo sucede a finales del embarazo, que exige que el cuidado de su ser trasladado a un hospital. Eso sólo me pasó a mí.

También podría estar planeando dar a luz en un hospital o centro de maternidad, sólo para descubrir que su bebé va a llegar antes de lo que esa institución está autorizado a entregarlos. Por ejemplo, el hospital cerca de mi casa no se puede entregar cualquier bebé de menos de 37 semanas, ya que no tienen una UCIN (Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales). En ambas situaciones, puede haber más de una opción disponible para donde dar a luz por lo que tendrá que tomar una decisión informada.

Cuando usted se enfrenta con una decisión tan importante, puede ser difícil decidir cuáles son los factores más importantes. A la luz de mi reciente experiencia, le sugiero que si usted tiene el tiempo para hacerlo, se comparan las políticas y normas de cada lugar de nacimiento potencial con respecto a las cosas que son más importantes para usted. Para algunas personas, que puede ser el aspecto de las habitaciones o las horas de visita y políticas. Para mí, si yo fuera a tener que tomar una decisión una vez más, una cosa que quiero saber es la política del hospital respecto a la alimentación de los recién nacidos.

Me di cuenta de que esto era importante un par de días después de que nació mi hijo. Durante el parto, una variedad de medicamentos fuertes estaban circulando por mi cuerpo a través de mi IV. Algunos de estos medicamentos son conocidos para suprimir la lactancia. También llegó a tener una cesárea, y que también puede afectar la lactancia.

Aunque parecía que Blake estaba alimentando bien, perdió mucho peso muy rápido y yo estaba obligado a él complementar con fórmula. Estoy muy dedicada a la lactancia materna y la nutrición que la leche materna proporciona. Si mi propia leche no era alimentar lo suficiente, yo quería complementar con leche materna de otra mujer, no la fórmula.

Cuando le pregunté a la especialista en lactancia si eso fuera posible, estuvo a punto de estallar en lágrimas. Explicó que si estábamos arriba en la UCIN, una receta para suplementos de la leche humana se podría escribir para él, pero no estaba disponible la leche materna a los bebés en la sala de maternidad normal.

Ella ha estado tratando de conseguir que la política cambió por un tiempo pero fue en vano. Tuve que dejar Blake alguna fórmula para un par de días, y yo estaba molesto por eso. Tan pronto como mi leche se produjo en que era capaz de dejar de complementar, pero todavía deseo que yo había conocido a investigar algunas de las políticas del hospital antes de que me eligió para entregar allí.

lunes, 9 de abril de 2012

Usted está embarazada


Cuando usted está embarazada, usted puede notar que la gente parece que lo trate diferente. Extraños mantener las puertas abiertas para usted, y otros extraños tratar de tocar su vientre en crecimiento. Las personas que no saben y nunca se han conocido pido que cuando se debe. Todo el mundo parece tener algo que decir a usted oa hacer por usted.

Se puede sentir un poco extraño al principio, pero en realidad puede ser bastante divertido y la liberación de incluir a toda "cosa embarazada" y salirse con cosas que no haría si no estaban embarazadas.

Por ejemplo, aunque el concepto de "comer por dos" no es lo que su médico le ordenó, la mayoría de la gente todavía piensa que las mujeres embarazadas deben comer lo que quieran cuando quieran. Cuando los antojos huelga o quiere desviarse de su camino por lo general nutritiva de comer, ir a por ello. Nadie te va a juzgar por comer papas fritas y pastel de queso en la misma comida. Usted no tiene que devorar a que la hamburguesa con queso en la intimidad de su hogar. Eres una mujer embarazada de hambre, por lo que comen.

Tan difícil como puede ser dejar que otros hagan las cosas por ti, ahora es el momento para disfrutar de toda la ayuda extra que se le presente. Como al revés como parece, los extranjeros tendrá las puertas abiertas para usted y le ayudará a su coche con sus tiendas de comestibles u otros artículos, mientras que su bebé está en su vientre.

Una vez que nazca su bebé y usted están haciendo malabarismos con el asiento de seguridad infantil o con bebé en una mano mientras trataba de abrir la puerta con la otra, nadie parece darse cuenta. Línea de tiempo para el aseo de señoras? Ponga en una expresión de dolor y ver las otras mujeres que invitan a la parte delantera de la línea. Vaya por delante, el parque en el lugar de estacionamiento "expectante madre". Está embarazada - que se merece un descanso de vez en cuando.

Una tercera cosa que usted puede conseguir lejos con el durante el embarazo está siendo un poco, eh, irritable. Esos sentimientos y arrebatos hormonales que tradicionalmente reservados para "ese momento del mes" podría estallar en cualquier momento debido a los cambios hormonales del embarazo. La gente entiende que el embarazo es un momento emotivo, y es probable que sean comprensivos si usted está de mal humor o lágrimas en los ojos.

lunes, 2 de abril de 2012

Antes de quedar embarazada


Si usted está pensando en quedar embarazada, o incluso si existe la posibilidad de que podría quedar embarazada, usted debe tener acceso a su salud lo antes posible.

Al entrar en un embarazo en la mejor salud posible se puede hacer un ingreso enorme en la salud de su bebé y la salud de usted durante todo el embarazo e incluso después. No sé cuántos ginecólogos y expertos en el embarazo que he hablado con los que dicen que quieren más pacientes buscan una evaluación de salud y cuidado antes de quedar embarazada.

Acceso a su estado de salud antes de quedar embarazada, no sólo le ayuda a identificar y tratar cualquier problema de salud posibles, pero puede ayudar a empezar con las vitaminas, dieta y ejercicio. Los medicamentos actuales que se encuentran en muchos necesitan ser cambiados a otro distinto que no afectará negativamente a su bebé o el embarazo.

Consulte con su médico al menos tres meses antes de que usted está planeando concebir. En esta visita, esperamos revisar su historial de salud, así como su historial de salud familiar. Su médico puede tener una serie de recomendaciones específicas para usted o pruebas de que él o ella desea para que usted tome.

También puede ponerse al día con las vacunas que pueda necesitar. Enfermar durante el embarazo puede tener resultados devastadores. A veces los adultos necesitan vacunas de refuerzo porque la inmunidad a una enfermedad no dura para siempre. Descubrí esto cuando yo estaba embarazada de mi tercer hijo y las pruebas indicaron que ya no era inmune al sarampión.

Su médico le puede recomendar que perder peso para reducir el riesgo de parto prematuro y otras condiciones. Si usted fuma, su médico puede ayudarle a crear un plan para dejar de fumar ahora.

Mientras tanto, es probable que sea prescrito o se les solicita tomar las vitaminas prenatales. Las mujeres que estén planeando un embarazo deben hacer por lo menos 400 microgramos de ácido fólico cada día para prevenir defectos del tubo neural. El tubo neural se empieza a formar en ti bebé, incluso antes de darse cuenta que está embarazada.

lunes, 26 de marzo de 2012

Encapsulación de la placenta


Me enteré de la encapsulación de la placenta durante el segundo trimestre de mi segundo embarazo. Uno de mis amigos más cercanos acababa de tener su tercer hijo y decidió tener su placenta encapsulado por primera vez. Mi amigo dio testimonio de la inmensa salud y recibió los beneficios de recuperación.

 Mi reacción inicial fue de indignación y curiosidad parte parte. El consumo de la propia placenta, parecía un poco extraño, pero tiene numerosos beneficios para la madre después del parto. Empecé mi propia investigación sobre el tema y pronto descubrió para mí los beneficios para la salud detrás de placentofagia. Mi investigación me ha dicho que la placenta le proporciona un equilibrio de las hormonas después del parto y también ayuda a combatir la deficiencia de hierro y la depresión post parto que es bastante común después de que uno ha dado a luz.

La ingestión de la placenta ayuda al proceso de curación, aumenta la producción de leche, y ayuda a combatir la fatiga. Hablé con mi partera sobre la encapsulación placenta y ella fue muy positivo al respecto. También hablé con mi hermana que había tenido un bebé recientemente y tenía la placenta encapsulado para la ingestión. Todo lo que he leído y oído hablar de la placenta de encapsulación fue extremadamente positiva. En el momento en que entré en mi tercer trimestre, que se había asegurado un especialista en la encapsulación placenta para procesar mi placenta una vez que nuestra hija nació.

El proceso fue fácil. Después de dar a luz de la placenta y la partera que mirar por encima para asegurarse de que estaba intacta, etc, que se llama el especialista de la encapsulación. A las pocas horas llegó a nuestra casa. Ella trajo a todo el equipo necesario para cocer al vapor y deshidratar mi placenta. Charlamos durante unos breves instantes y se pusieron a trabajar.

Después de una hora de mi placenta estaba deshidratado (un proceso que lleva veinticuatro horas). Al día siguiente regresó a tierra y encapsular la placenta procesado (que también hizo una tintura para su uso posterior). Comencé a tomar las cápsulas de la noche y continuó tomando de acuerdo a sus instrucciones.

Los resultados fueron sorprendentes! Dentro de un día que tenía más energía y el dolor y el dolor había disminuido. Mi producción de leche fue (y sigue siendo) muy bien. Mi sangre se redujo a casi nada el plazo de nueve días. Mi útero contraído con tanta rapidez que yo era capaz de encajar en un par de jeans pre-embarazo en menos de dos semanas.

A los pocos días me sentí como si ni siquiera había tenido un bebé! Yo seguía teniendo los niveles fenomenales de energía. Estoy muy impresionado con los beneficios que he recibido de tomar las cápsulas de la placenta y puedo decir sin duda que voy a tener mi placenta encapsulado con mis futuros embarazos!

lunes, 19 de marzo de 2012

Mujeres embarazadas que anidan


Muchas mujeres embarazadas experimentan un deseo de limpiar, organizar, y de otra índole tener en sus hogares listos para su nueva llegada. A menudo resulta en un frenesí de actividad que se conoce comúnmente como "nidos". Anidación puede ocurrir en cualquier momento durante el embarazo, y muchas veces hay un impulso adicional de que la derecha al final del embarazo, métodos de trabajo.

Por alguna razón, durante mi último embarazo, yo no tenía ninguna necesidad de nido. He escuchado a mis dos compañeros de embarazadas - Los trabajadores describen las cosas que estaban haciendo en torno a sus hogares y empecé a preguntarme si yo era anormal, porque yo no estaba dispuesto a hacer ese tipo de cosas en absoluto. De hecho, cuanto más lejos a lo largo de mi embarazo me dieron, menos ordenada se convirtió en mi casa.


Lo hice un poco de investigación y descubrió que no todo el mundo nidos durante el embarazo. Para aquellos que lo hacen, sólo un poco de experiencia el tipo de cosas que dan lugar a historias interesantes para contar.

Estoy seguro que has oído historias de mujeres que han alfabetizadas alimentos enlatados, limpió el piso de la cocina con un cepillo de dientes, lavado y doblado de ropa para bebés de veinte veces, y así sucesivamente. Si usted se encuentra haciendo estas cosas, sepan que son perfectamente normales. Si no es así, sabemos que usted también es perfectamente normal.

Esta vez, tengo muchas ganas de limpiar y organizar. A veces soy capaz de actuar sobre los impulsos, ya veces no elige a cualquiera porque necesito el tiempo para realizar su trabajo o debido a ciertas tareas no sólo son viables con un hijo de dos años "ayuda" y que sería más frustrante que productivo.

Afortunadamente, mi pequeña "ayuda" está siempre dispuesto a ayudar, así que cuando se piensa en un proyecto que creo que podemos afrontar con éxito juntos, él es un participante dispuesto.

lunes, 12 de marzo de 2012

Los antojos del embarazo


El embarazo es sin duda una experiencia interesante en muchos niveles. No sólo usted está experimentando el milagro de la vida se desarrolla dentro de su propio cuerpo, que están experimentando las sensaciones físicas que van desde el extraño dolor y todo lo demás.

A esto se añade la mezcla de emociones que acompañan a un flujo fluctuante de las hormonas, aderezarlo todo con un pocos los antojos de alimentos, y usted se tiene un suministro sin fin de entretenimiento para los nueve meses.


Los antojos de comida siempre me ha interesado porque me encanta la comida. Siempre me pregunté si les pido nada raro durante el embarazo, porque yo había escuchado las historias sobre las salmueras y el helado, y otras cosas. Durante mi primer embarazo, pasé por fases en las cosas que quería ciertas cosas más y otras menos.

Por ejemplo, alrededor de un mes, no pude conseguir suficiente cantidad de frutas frescas. Era casi todo lo que quería. Por otro poco de tiempo, quería Fruity Cheerios. Algunos días, era un requisito absoluto que tenía un poco de carne roja. Los antojos no fuera por las cosas inusuales, pero me sorprendió con la intensidad y la forma muy específica que eran.

En esta ocasión, he tenido algunos de los mismos antojos y algunos diversos. Durante los primeros meses, mi apetito no era su auto robusto habitual y yo quería sobre todo alimentos fáciles de digerir. Cuando le expliqué esto a mis parteras, me dijeron que a pesar de que yo no estaba vomitando, que era la forma de mi cuerpo de experimentar náuseas. Me pareció que para ser muy interesante, y me dio las gracias que mi cuerpo era tan creativo como de averiguar una forma de ser náuseas, sin enviarme corriendo hacia el baño de mujeres.

El ansia Fruity Cheerios hizo una reaparición durante un rato, y en un principio traté de satisfacer con una variedad orgánica, que tenía menos azúcar.

Eso no funcionó - He encontrado el otro cereal para ser repugnante, y tuvo que volver atrás y obtener el Fruity Cheerios. Rollos de canela fueron el tema de la semana de una semana. Yo no iba a necesitar ahora, sin embargo. De hecho, justo en este momento no estoy nada deseo. Vamos a ver cuánto dura.

¿Qué tipo de antojos que se tiene o ha tenido durante el embarazo?

lunes, 5 de marzo de 2012

La piel después del parto


Lógicamente, la piel del vientre se ha distendido. Está blanda, flaccida. De todos modos, como ya te he dicho, por muy espectacular que parezca, la situación no es tan grave. Todo volverá pronto a la normalidad, por poco que adoptes una alimentación rica en proteínas y que no olvides la sesión diaria de gimnasia.

Hablemos ahora del aspecto de la piel. Ha llegado el momento de transformarla.

Tal vez hayas sudado mucho durante el parto y se te haya deshidratado particularmente la piel. Tan pronto como puedas, date una ducha y, una vez seca, fricciónate con un guante de crin o con una esponja seca del tipo llamado loo/a. Esta fricción dará como resultado desembarazar tu piel de todas las impurezas que le impiden respirar normalmente.

Lo ideal es proceder después de la fricción a un descamado del cuerpo. Se venden ahora en las farmacias y en las perfumerías lociones descamadoras, o pelling, que, al afinar el grano de la piel, aceleran la renovación celular y permiten que penetren mejor los productos con que vas a cuidarla.

Después de la fricción y el descamado, hay que nutrir la piel para hacerla más suave y más sedosa. Aplícate en todo el cuerpo ya sea una leche limpiadora, ya sea una crema hidratante y tónica, ya sea un aceite. No te des demasiados baños calientes, puesto que perjudican la tonicidad de la epidermis.

Tal vez hayas advertido después del parto la presencia de una raya oscura central que va del pubis al ombligo. No te preocupes. Desaparecerá por sí misma en los meses siguientes. Sin embargo, se ha de tomar una precaución: no la expongas al sol si quieres que se atenúe rápidamente.

Si se han formado veteaduras en tu cuerpo durante el embarazo, te darás cuenta de que te han dejado en la piel pequeños rastros blancos, un poco nacarados. Desgraciadamente, en el estado actual de nuestros conocimientos, no se puede hacer nada para suprimirlas, ni siquiera recurriendo a la cirugía estética, ya que no hay manera de devolver a la piel su elasticidad.

Muchas mujeres se quejan de padecer de celulitis después del parto. En realidad, el embarazo no la aumenta en un grado apreciable, pero se la confunde a menudo con una hinchazón debida a una mala circulación sanguínea y linfática. La gimnasia, el caminar y la natación son los mejores ejercicios para hacer desaparecer esta infiltración. Si no basta con eso, lo ideal es recurrir a un buen kinesitera-peuta para una serie de masajes.

lunes, 27 de febrero de 2012

Consejos de alimentación para embarazadas


No prescindas bajo ningún pretexto de la leche y los productos lácteos. El calcio contribuye a la formación del esqueleto y de los músculos del feto. Una carencia causaría perturbaciones tanto en la madre como en el niño. Y además, la leche y los productos lácteos son formidables.

Digamos que matan dos pájaros de un tiro. Al tomarlos, no sólo tomas calcio en gran cantidad, sino también proteínas. Una ventaja a no desdeñar, sobre todo en período de embarazo, cuando el calcio y las proteínas son absolutamente indispensables, tanto para la futura madre como para su hijo.

Se podría incluso pensar (siempre que te gusten, claro) en un régimen compuesto en exclusiva de productos lácteos y fruta, sin temor a carencias alimentarias. En la práctica, la carne no resulta imprescindible, ya que no contiene más que proteínas. En cambio, no deben suprimirse nunca los productos lácteos, que son insustituibles.

A partir del segundo mes del embarazo, debes también consumir más psoteínas (o prótidos), es decir: carne blanca o roja sin desperdicios, aves, despojos, pescado, jamón, huevos o productos lácteos. Insiste en los alimentos ricos en las sustancias indispensables para tu salud y para el desarrollo de tu hijo. Las proteínas son necesarias para la formación de los tejidos del feto, para la renovación de las células. Participan en la formación de una placenta sólida, en el desarrollo del útero y en el incremento de la masa sanguínea.

Tu organismo tiene también necesidad de una cantidad de sales minerales dos veces mayor que de ordinario, en particular de 36 mg diarios de hierro, en lugar de 21 mg. El hierro se encuentra principalmente en el hígado, los riñones y las legumbres.

No olvides que participa siempre en la formación de los glóbulos rojos. Por eso la mujer embarazada a la que le falta hierro se halla con frecuencia fatigada y anémica.

La vitamina C va a la par con el hierro, ya que sirve para fijarlo, esto es, para facilitar su asimilación. Además, contribuye a la formación de los cartílagos y los huesos del niño.

En cambio, la necesidad de azúcar (glúcidos) y de grasa (lípidos) disminuye. Por lo tanto, evita el azúcar y las grasas.

lunes, 20 de febrero de 2012

Ejercicios para bebés de menos de 6 meses


Tender la mano hacia un objeto estacionario cuando el niño está en movimiento. Siéntate con el niño ante la mesa y pon sobre ella un objeto interesante. Con el niño en posición sentada, gira poco a poco a la derecha y a la izquierda. Para asir el objeto, tendrá que compensar con la mano el movimiento que estás haciendo con él.

Tender la mano hacia varios objetos en distintas posiciones. Ofrécele juguetes interesantes cuando se halla en tas posiciones, no sólo echado boca arriba, sino también de costado o boca abajo o mientras está sentado en tu regazo. Puedes complicar el ejercicio pidiendo, por ejemplo, a su padre que lo levante en el aire en posición horizontal o vertical y ofreciéndole el objeto en esta posición fuera de lo común.

Tender la mano hacia objetos en combinación con otros movimientos del cuerpo. En el sexto mes, ofrece al niño juguetes de modo que tenga que incorporar otros movimientos al de alcanzarlo, por ejemplo, volverse boca arriba o boca abajo cuando está de costado, o girar a la derecha o la izquierda, cuando está boca abajo. Esto le enseñará a combinar el tender la mano hacia los objetos con otros movimientos, como el giro, la flexión y la extensión. Es importante efectuar este entrenamiento desde el sexto al duodécimo mes, cuando tendrá que aprender a combinar movimientos parciales con movimientos más amplios y complejos.

Tender la mano hacia objetos por encima de obstáculos. En el sexto mes, cuando el niño domina ya por completo el proceso de guiar directamente la mano hasta el objeto visto, enséñale a hacerlo indirectamente, esto es, a evitar los obstáculos. Mete un objeto atractivo en un cajón o en una caja menos interesantes, que no ejerzan sobre él ninguna atracción por sí mismos. Si quiere tocar el juguete, verá que no puede hacerlo directamente, sino que habrá de superar la pared y emplear la mano de la manera apropiada. Puedes colocar la caja de modo que el niño haya de meter la mano en ella por arriba, por la derecha o por la izquierda. Si trata de resolver la situación mediante movimientos de la mano, es señal de que empieza a comprender las relaciones espaciales.

Asimiento asimétrico con ambas manos. Dale un bidoncillo vacío o una taza de plástico, a fin de que la mano izquierda agarre el asa y tenga que presionar la derecha contra el lateral de la taza. Dáselo después en sentido inverso, para que la mano derecha agarre el asa y la izquierda presione el lateral de la taza. Esto le enseñará a asir simultáneamente cosas distintas con ambas manos, una tarea que resulta difícil para un chiquillo de seis meses.

lunes, 13 de febrero de 2012

Suba de peso en el embarazo


«Suba usted ahí», dice el ginecólogo, señalando un poco la balanza con ademán autoritario. Y tú piensas, sintiéndote ya culpable: «¡Dios mío! ¿No habré engordado demasiado? ¿Y si tiene la balanza estropeada?

¿Y si no marca lo mismo que la mía?»
Una amiga mía, durante su primer embarazo, tenía un propensión muy marcada a deslizarse por la resbaladiza pendiente de su afición natural a los dulces.

No encontró nada mejor que ayunar durante cuarenta y ocho horas antes de las visitas mensuales al ginecólogo. Tan pronto como salía de la consulta, se precipitaba a la pastelería de enfrente...

Uno de los papeles del médico durante el embarazo consiste en vigilar tu peso. Cuando has engordado con exceso, te aconseja por regla general que «tengas cuidado» hasta la próxima visita. Normalmente, un mes después, el peso está ya controlado. Pero, entretanto, arréglatelas como puedas... Habrás de seguir el régimen y de equilibrarlo bien por ti misma. Voy a enseñarte a hacerlo, ya que no se pierden unos kilos suprimiendo lo primero que a una se le ocurre.

A partir del cuarto mes, la ración alimenticia aumenta en 200 calorías al día por término medio. Más que suficiente, ya que las necesidades del niño se incrementan poco. Mantente en esta cantidad durante el cuarto y el quinto mes. Un aumento mayor provocaría muy pronto un exceso de peso, como le sucede a la mayoría de las mujeres.

200 calorías las contienen, por ejemplo:

— 100 g de carne de vaca,
— tres huevos,
— cuatro yogures naturales,
— 25 g de mantequilla,
— diez cuadradillos de azúcar (o sea, 50 g),
— seis biscottes,
— veinte patatas fritas a la inglesa,
— 50 g de cantal o de gruyere,
— 80 g de pan, es decir, aproximadamente un tercio de una barra de cuarto.
— 40 g de chocolate.

Todos esos alimentos aportan unas 200 calorías.

lunes, 6 de febrero de 2012

No comer demás en el embarazo


No comer menos de las cantidades indicadas.

No sirve de nada pasar hambre, ya que no se aguantará mucho tiempo. El régimen básico proporciona de 1000 a 1500 calorías diarias, según las cantidades y los alimentos elegidos. No bajes de esta ración diaria, pues te abrumaría muy pronto el cansancio y te obligaría a abandonar. La cuestión está en comer regularmente, sin saltarse ninguna comida y sin reducir las cantidades para adelgazar con mayor rapidez.

La naturaleza es muy astuta. Cuando se disminuye la ración diaria de calorías, las células grasas modifican su comportamiento, y nuestro organismo llega en un solo mes a reducir sus necesidades a la mitad. Entra automáticamente en estado de hibernación, es decir, para ejercer la misma actividad, el cuerpo consume mucho menos carburante y quema, en consecuencia, menos calorías.

Vemos con frecuencia a nuestro alrededor mujeres que se pasan la vida engordando y adelgazando, sin conseguir nunca estabilizar su peso.

La mayor parte de las veces se debe al hecho de que pasan del régimen más estricto —casi de hambre aguda—, seguido durante unas semanas (el tiempo de perder los kilos suplementarios), al abandono alimenticio más absoluto. De repente, ingieren todavía más grasas, más azúcar, salan más sus comidas y toman alimentos más ricos en calorías que antes.

El organismo, que no había necesitado más que un mes para frenar y reducir su consumo de calorías, tardará seis para aumentarlo de nuevo y volver al mismo nivel que antes de emprender el régimen. Es traidor.

Por lo tanto, no te molestes en reducir las cantidades indicadas en el régimen. No lo soportarías mucho tiempo y, al detenerte, recuperarías todavía más kilos de los que habías perdido.

lunes, 30 de enero de 2012

Buenas posturas en el embarazo


Voy a intentar pasar revista contigo, sirviéndome de pequeños croquis, a las buenas y malas posturas del cuerpo durante los tres últimos meses del embarazo.

Regla general.
Cuanto menos te arquees, menos molestias tendrás, cualquiera que sea la posición en que te encuentres.

El dolor de espalda aqueja al 50 % de las mujeres durante el embarazo. Este sufrimiento está provocado por una atrofia de los músculos de la región lumbar, incapaces de realizar el esfuerzo que les exige el peso del vientre desviado hacia adelante. Así pues, cuanto más arqueas la espalda, más avanza el vientre y, en una reacción en cadena, más te duele la espalda.

Trata de meter siempre el vientre al máximo (cosa más fácil de decir que de hacer), pero, sobre todo, procura mantener la espalda recta. No te arquees, echa los hombros hacia adelante, enderézate como si quisieras crecer.

Posición vertical
Para aprender a llevar bien al niño, habría que mantenerse como si la espalda estuviese siempre apoyada contra una pared. No intentes nunca compensar el impulso irresistible del vientre hacia adelante arqueando los ríñones y echando los hombros hacia atrás.

Desgraciadamente, la mayoría de las mujeres occidentales tienen tendencia a encorvarse cuando están embarazadas, con posición muy mala para el cuerpo. Piensa en las elegantes posturas de las mujeres indias, por ejemplo, acostumbradas a mantenerse erguidas, a moverse sin encogerse.

lunes, 23 de enero de 2012

Alimentación del recién nacido


Si no das el pecho a tu hijo, la hora del primer biberón después de volver a casa llega muy pronto. Para prepararlo, necesitas:

— un aparato para esterilizar, en caliente o en frío;

— seis biberones (esterilízalos por adelantado) completos, con las tetinas para la primera edad;

— doce botellas de agua mineral (sin gas);

— dos cepillos limpiatubos para los biberones y las tetinas;

— pregunta en la maternidad la marca de la leche que le van a dar a tu hijo y compra dos cajas grandes.

sábado, 21 de enero de 2012

Lo que necesita tu bebé al comienzo de vida


EL EQUIPO DEL BEBÉ

— Seis jubones cruzados (tres para tres meses, tres para seis meses);

— seis bragas de felpa extensible (tres tamaño tres meses, tres tamaño seis meses);

— tres bandas umbilicales (si no ha caído aún el cordón);

— dos chaquetitas de punto (una tamaño tres meses, una tamaño seis meses);

— cuatro pares de patucos o de calcetines (dos tamaño tres meses, dos tamaño seis meses);

— seis jubones de lana o de algodón (tres tamaño tres meses, tres
tamaño seis meses);

— cinco pantaloncitos de lana o de algodón, o peleles, según la estación (dos tamaño tres meses, tres tamaño seis meses);

— un gorrito;

— seis pijamas (tres tamaño tres meses, tres tamaño seis meses);

— un mono de tirantes, talla-seis meses;

— en invierno, una combinación para salir, talla tres meses;

— seis baberos de felpa para las comidas.

¡Atención! No olvides comprobar el buen funcionamiento de la lavadora. A partir de ahora, la vas a usar casi a diario.

Piensa ya en la manera en que vas a secar la ropa del niño: instalar un tendedero, comprar un armario secador o una secadora.

jueves, 19 de enero de 2012

Uso del cinturón en el embarazo


El cinturón en el embarazo

Felizmente, todos los médicos un poco al día se muestran poco partidarios de él. No ofrece ningún interés, todo lo contrario. Son los músculos de la banda abdominal los que deben sostener el útero, y no un vulgar cinturón de embarazo.

No les impidas hacer su trabajo, pues se debilitarían muy de prisa y te encontrarías después del alumbramiento con un vientre blando y flaccido. Si quieres sentirte un poco más sujeta, haz trabajar los músculos.

Varios de los ejercicios de la sesión de gimnasia están destinados de manera especial a ellos.

La banda abdominal es un cinturón de músculos. Oblígales a cumplir su papel. Los necesitarás en el momento del parto y después de él.

martes, 17 de enero de 2012

Consejos de maternidad para madres primerizas


ALGUNAS RECOMENDACIONES SUPLEMENTARIAS

- Antes de salir hacia la maternidad, haz un buen encargo a la tienda. Piensa sobre todo en las reservas, las latas, los platos ya preparados y los congelados.

- Prepara por adelantado el máximo de ropa limpia para toda la familia.

- Ten previsto un medio de locomoción para ir a la maternidad. Tal vez te encuentres sola cuando llegue el momento de salir. Anota varios números de servicios de taxi por teléfono y el de un servicio de ambulancias que trabaje con la maternidad en la que vas a dar a luz.

- Apunta en una ficha la dirección y el número de teléfono de la maternidad, las horas de visita, la lista de parientes y amigos a los que has de avisar después del nacimiento de tu hijo y sus números de teléfono.

- Busca un pediatra que viva cerca de tu domicilio.

- Encarga las participaciones, si has decidido enviarlas.

domingo, 15 de enero de 2012

Qué necesita la habitación del bebé


LA HABITACION DEL BEBÉ

— un pesabebés alquilado en la farmacia;

— una cuna, una cama o un serón;

— un colchón;

— dos o tres sábanas de goma;

— tres juegos de cama;

— una manta;

— doce pañales cuadrados de algodón (yo los coloco sobre la sábana de abajo, a la altura de la cabeza del niño, para que no manche la sábana al vomitar);
una mesa especial para vestido;

— un baño o una tina grande;

— un termómetro de baño;

— un termómetro de pared (la temperatura ambiente de la habitación del niño debe ser de 20 °);

— en caso necesario, algún aparato de calefacción extra;

— un cochecito.
Se puede dar muy bien el caso de que tengas que cambiar de ropa al niño tan pronto llegues a casa. Piensa, pues, en dejar a mano la mesa para vestirlo.

viernes, 13 de enero de 2012

El aseo del bebé


EL ASEO DEL BEBÉ

— Un paquete de pañales completos o de pañales desechables (talla: menos de cinco kilos);

— tres portapañales o una bolsa de picos de plástico;

— algodón;

— una caja de pañuelos de papel;

— un frasco de leche limpiadora;

— un tubo de pomada especial para bebés;

— un cepillo para el pelo muy suave, preferentemente de seda;

— un par de tijeras para las uñas especiales para bebés;

— un termómetro clínico;

— un frasco de champú especial para bebés;

— un jabón extragraso o un frasco de jabón líquido;

— un frasco de eosina acuosa;

— una caja de compresas estériles;

— un paquete de bastoncitos de algodón;

— un frasco de suero fisiológico;

— un frasco de agua de rosas (para limpiarle la cara);

— un frasco de colonia especial para bebés, sin alcohol;

— dos toallas grandes de felpa, mejor con capucha, que resulta más práctico.

miércoles, 11 de enero de 2012

La Sal en la alimentación en el embarazo


No pongas más ni menos sal que de costumbre. Salvo en ciertas complicaciones del embarazo (hipertensión, albuminuria, edemas), y sólo si el médico te lo exige, no disminuyas la cantidad de sal que sueles tomar en época normal: de 10 a 12 g diarios como término medio.

Pocas veces es necesario un régimen sin sal muy estricto, y sólo para las mujeres que tengan un problema médico muy preciso.

Para todas las demás, un régimen sin sal, incluso ligero, no hará más que privarlas inútilmente.

En el caso de que hayas engordado demasiado, ten en cuenta que el suprimir la sal no te servirá para adelgazar. Se trata de un simple truco: como los alimentos no salados parecen insípidos, automáticamente se come menos y, por consiguiente, se adelgaza. Esto es cierto tanto durante el embarazo como fuera de él.

Ciertos ginecólogos ordenan aún por sistema a sus pacientes que sigan durante el último mes del embarazo un régimen sin sal, con objeto, dicen, de evitar una retención de agua en los tejidos maternos y facilitar así el parto. Tal relación de causa a efecto no se ha demostrado hasta el momento, y los resultados difieren según la mujer de que se trate.

En cambio, de lo que sí se está seguro es de que el parto será tanto más fácil cuanto menor haya sido el aumento de peso durante los nueve meses.

Un régimen sin sal, por muy estrictamente que se siga durante el último mes del embarazo, no permitirá nunca perder un excedente de peso constituido por grasa. Sólo se perderá agua. El adelgazamiento será por lo tanto artificial, ya que, si bien es cierto que la sal retiene el agua, los kilos excedentes no están formados por agua, sino por grasa. Al fin y al cabo, no somos esponjas.

lunes, 9 de enero de 2012

Piel y cutis en el tercer trimestre


No interrumpas bajo ningún pretexto ios cuidados que emprendiste durante los dos primeros trimestres. El momento en que tu cuerpo aumenta más de tamaño, en que la piel se tensa al máximo, no es el más apropiado para flaquear y correr el riesgo de perder todos los beneficios obtenidos con tus esfuerzos.

Aun en el caso de que no estés completamente convencida de la utilidad de hacerlo, úntate todo el cuerpo con una buena crema nutritiva, o con aceite. Por lo menos, no te hará ningún daño.

En la primera quincena del noveno mes, hay que pensar en una depilación de las piernas y las axilas, bien personalmente o acudiendo a un instituto de belleza, como se tenga por costumbre. Sin embargo, todas aquellas o quienes les duelen las piernas o padecen de trastornos circulatorios, han de tomar la precaución de no emplear cera caliente, que les está prohibida.

Nada nuevo en lo que se refiere a los cuidados del cutis, que siguen siendo los mismos que durante el segundo trimestre. Continúa limpiándolo, hidratándolo, nutriéndolo, dándole masaje.

Y no olvides de maquillarte, si lo hacías antes de quedar embarazada. Recuerda siempre que un cutis bonito, tanto si la mujer está embarazada romo si no lo está, depende de un buen estado general, basado en una buena higiene alimenticia y un sueño regular.

Sobre todo, no tomes el embarazo como pretexto para abandonarte y renunciar a la coquetería. Maquíllate cuidadosamente la cara, sobre todo los ojos. Nadie se fijará en otra cosa.

Ha llegado también la ocasión de ponerse en manos de un buen profesional para someterte a una limpieza a fondo de la piel. Si no se hace ahora, no se hará nunca.

sábado, 7 de enero de 2012

El cabello en el tercer trimestre


Dentro de una semanas, tal vez dentro de unos días, llegará el gran instante. Empieza a pensar ya en tu peinado. No hay nada más deprimente que encontrarse en la clínica con el pelo graso y triste. Después del parto, una tiene necesidad de sentirse hermosa, arreglada, en el máximo de su belleza y de su esplendor.

Si se te abre el pelo, si lo tienes quebradizo o falto de tono, no vaciles en ir a la peluquería para que te hagan un buen corte de pelo. Le irá muy bien. Si ya lo llevas corto, calcula, en función de la fecha prevista teóricamente para el parto, el momento ideal para ir a la peluquería.

Una de mis preocupaciones al final de mis embarazos —bastante banal, a decir verdad— era el miedo a llegar a la clínica con el pelo sucio. Quería estar en plena forma para acoger a mis hijos sucesivos. Como si la primera visión, la primera imagen de su madre fuera a inscribirse de manera indeleble en su inconsciente...

Lo que importa es el estado general del pelo, y el corte. Al fin y al cabo, siempre se lo puede lavar una en la clínica. Por si acaso, no olvides meter champú y un buen secador en el maletín que Heves contigo a la maternidad.

jueves, 5 de enero de 2012

Posturas y posiciones en el tercer trimestre


Una vez más, no dejes que el peso de tu vientre acentúe la curva natural de la espalda. No lleves a tu hijo como un globo en el vacío.

Toda tu musculatura, desde los abdominales hasta la espalda e incluso la nuca, se hallaría en un estado de tensión permanente para sostenerlo. Imagina el cansancio suplementario que eso supone para todo el cuerpo.

Yérguete y oxigénate mediante respiraciones profundas, muy amplias y relajadas. No olvides que tu hijo se nutre no sólo de lo que comes, sino también de tu sangre, que debe estar bien oxigenada. Respira profundamente. Eso te ayudará siempre a relajarte.

A menudo, al final del octavo mes, los dolores lumbares se atenúan porque la cabeza del niño entra en la pelvis. El vientre desciende entonces, cambia de forma, y la futura madre experimenta una sensación de aligeramiento general, respira mejor, porque la presión del feto sobre la caja torácica disminuye.

Es evidente que, al final del embarazo, no se puede dormir sobre el vientre, aunque antes se acostumbrase a hacerlo. En cuanto a dormir de espalda, sin duda se tendrá una sensación de aplastamiento, de opresión.

La posición ideal en este momento consiste en dormir echada de lado, teniendo buen cuidado de estirar la pierna de debajo y doblar lo más alto posible la de encima, colocándose un cojín bajo la rodilla para no comprimir el vientre y para despejar bien la pelvis.

Posición incorrecta
El centro de gravedad del cuerpo se proyecta hacia atrás, lo que causa tensiones, principalmente a nivel de la espalda.
Buena posición
La línea de gravedad del cuerpo recobra su equilibrio.

martes, 3 de enero de 2012

Viajes en embarazadas


Los viajes en el embarazo

Como ya dije en el capítulo dedicado al primer trimestre, hay dos meses durante el embarazo particularmente peligrosos para emprender un viaje:

— de una parte, el segundo mes, debido al riesgo de aborto espontáneo;

— de otra parte, el sexto mes.

Una mujer embarazada de cinco meses completos y, por lo tanto, en el máximo de su forma, comprende mal en principio por qué el médico le prohibe todo viaje durante ese mes.

En realidad, hay una razón muy sencilla. En ese estadio del embarazo, los riesgos que corre "el feto en caso de parto prematuro son todavía mayores. El doctor Rene Guglielmina, ginecólogo-tocólogo, dice: «Un niño nacido durante el sexto mes del embarazo es casi viable, cosa que no ocurre antes. Pero si bien puede salvarse, hay que saber que, por regla general, quedan secuelas».

Así que ten un poco de buen sentido y no juegues con el fuego. Si no te queda más remedio que efectuar un viaje, soluciona las cosas para hacerlo durante el quinto mes.

Y si tu embarazo está considerado como «peligroso» o «problemático», no viajes.

De manera general, no dudes en consultar a tu médico antes de emprender un desplazamiento de importancia, cualquiera que sea el momento de tu embarazo.

domingo, 1 de enero de 2012

La salud mental en el embarazo


Desde el punto de vista psicológico, al empezar el segundo trimestre se aborda la fase más tranquila, la más equilibrada del embarazo, en la que nos sentimos más seguras.

En primer lugar, ya estás prácticamente libre de los riesgos de ¡iborto del primer trimestre y todavía no te angustia la idea de un parto prematuro, ni la del parto propiamente dicho.

Y además, ahora sí que sientes vivir a tu hijo en tu interior. Ahí está, existe, muy presente de día y de noche. Los primeros movimientos del feto representan un acontecimiento capital para la futura madre. Dan testimonio a la vez del embarazo y del niño. Gracias a los movimientos, el bebé existe para ti, tiene un cuerpo, se comunica contigo. Desde ese momento, se inicia el diálogo entre la madre y el hijo.

Con frecuencia, en esta época, la mujer se repliega sobre sí misma, sobre el pequeño ser que va a monopolizar toda su atención. Así quedan los dos encerrados en el interior de una burbuja mágica. Las señales que llegan del lejano mundo exterior parecen amortiguadas por una pantalla de algodón. La mente se vuelve sin cesar al fondo de ese vientre en que se mueve el hijo. La mujer está como «poseída», en plena introversión. La familia, la profesión, la casa, los amigos... Todo pierde interés a favor de un retorno a sí misma.

Ciertas mujeres padecen una «regresión». Al volverse hacia su hijo, se vuelven hacia sí mismas. La primera infancia vuelve de manera natural a la superficie, a bocanadas. Es cómodo y tranquilizador. Se acaban las angustias. Pero la regresión implica una dependencia, una necesidad de protección. La mujer busca apoyo en su marido, en el ginecólogo, que harán las veces de protector, de padre.

El trastorno físico y psíquico vivido por la mujer durante el segundo trimestre del embarazo provoca a la vez una introversión y una regresión, que sirven de muletas para ayudarnos a soportar esta verdadera muda.

En este estadio del embarazo, la mujer embarazada no puede ya querer a su hijo, puesto que no existe todavía. El amor que cree sentir por él no es más que una forma particular del amor de sí misma.

En todo caso, vive plenamente el segundo trimestre de tu embarazo. Se trata de un período de regocijo, de satisfacción profunda para la futura madre. Esta anticipación maravillosa de las alegrías de la maternidad no se compara con nada. Algunas mujeres encuentran incluso tan agradable el hecho de estar embarazadas que, tan pronto como dan a luz a su hijo, empiezan ya a pensar en concebir otro.

En cuanto a mí, el embarazo no me parece atractivo hasta ese punto. Pero hay que confesar que el segundo trimestre supone un período feliz, lleno de satisfacciones. Unase siente serena, atrayente, radiante, con la tez clara. Por lo demás, muchos hombres piensan, que una mujer nunca es tan seductora como cuando vive su embarazo de manera dichosa.

viernes, 30 de diciembre de 2011

Yoga en el tercer trimestre de embarazo


Continúa haciendo con regularidad los mismos ejercicios de gimnasia suave que te recomendamos en el segundo trimestre y que a estas alturas debes conocer ya de memoria.

La sesión está calculada para que se adapte a los últimos seis meses del embarazo. El vientre no te molestará, y esos movimientos, que tienden, extienden y flexi-bilizan tu cuerpo, te enseñarán también, de manera inconsciente, la relajación y la manera correcta de respirar, preparándote, en las mejores condiciones, para vivir el parto ya cercano.

Cuidado con no forzar. Si un ejercicio te cansa o te parece demasiado difícil, no insistas. Ya lo intentarás unos días más tarde. De momento, pasa al siguiente. Por otra parte, las cifras que doy en cuanto al número de veces que se ha de repetir cada ejercicio no tienen más que un valor indicativo. Si estás demasiado cansada, detente antes de terminar la serie. Tú sola puedes juzgar lo que te ocurre. Permanece siempre atenta a tu cuerpo, que será tu mejor guía.

Importa saber que la sesión representa un todo homogéneo y equilibrado. Existe una relación lógica entre los diversos ejercicios.

Si uno de ellos fatiga un poco, allí está el segundo para procurar el descanso y la relajación. Si uno pone en movimiento ciertos músculos y ciertas partes del cuerpo, el siguiente moviliza los que no trabajaron en el anterior. Por ese motivo, más vale ejecutar toda la sesión al propio ritmo, en vez de forzar al principio y detenerse a medio camino.

miércoles, 28 de diciembre de 2011

La Silueta del tercer trimestre


Esta vez, ya no puedes ocultarlo. No cabe duda de que estás encinta. Ahí está tu silueta para demostrarlo. En este estado del embarazo, la modificación no se reduce a un cambio de volumen del vientre, sino que se extiende a toda la apariencia física.

El tamaño de los senos se ha estabilizado desde el comienzo del segundo trimestre y, si pones mucho cuidado en no aumentar demasiado de peso, no hay ninguna razón para que la cara, la espalda, los brazos, los muslos y las piernas cambien de tamaño o de volumen. Todo lo más, advertirás una ligera pérdida de musculatura, que será menos importante si has practicado regularmente la natación y/o la gimnasia suave.

Al iniciarse el tercer trimestre, el fondo del útero se encuentra muy por encima del nivel del ombligo y, en el noveno mes, alcanza la punta del esternón. Ciertos órganos empiezan a manifestar síntomas de compresión. El espacio ocupado por la vejiga se reduce, lo que provoca frecuentes ganas de orinar.

La parte inferior de los intestinos tiende a llenarse de manera insuficiente y se observa con frecuencia un estreñimiento debido a la presión sufrida. La capacidad de expansión de los pulmones de la futura madre disminuye, por lo que puede sentirse oprimida, tener palpitaciones. También el estómago está comprimido. En esta fase del embarazo, se alcanza el máximo de volumen aparente.

Durante estos últimos meses, el útero se prepara ya para la expulsión. Toma la forma de una pera vuelta hacia abajo. Se desarrolla pues, en la parte superior del vientre femenino, al cual da perfiles diferentes, ya sea con el vientre apuntando hacia adelante, ya sea redondeado desde una cadera a la otra. Según la tradición popular, la forma del vientre varía de acuerdo con el sexo del niño que va a nacer: chico si la tripa apunta hacia adelante, chica en el caso contrario. Puedo asegurarte que no hay la menor verdad en eso.

En realidad, el perfil de una mujer al final del embarazo varía con el peso del niño, el volumen del líquido amniótico y el estado de su pared abdominal.

Durante el tercer trimestre, no es raro sentir contracciones. Las fibras musculares del útero se endurecen como lo harán en el momento del parto, con la sola diferencia de que las contracciones son en este momento espaciadas, irregulares y casi siempre indoloras.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Los senos en el tercer trimestre de embarazo


Los senos se mantienen en su volumen máximo. Los vasos sanguíneos que los irrigan suelen transparentarse mucho bajo la piel tensa. Los pezones están ya dispuestos para la lactancia y segregan de vez en cuando un poco de calostro, el líquido amarillento al que ya me he referido.

Ciertos médicos recomiendan incluso apretar sistemáticamente los senos, con objeto de que el calostro abra los canales galactóforos, favoreciendo así el mecanismo de la lactación.

En realidad, se trata de un ensayo de la verdadera subida de la leche, que no tendrá lugar hasta el tercer día después del parto.

Si has decidido amamantar a tu hijo, la única preparación para la lactancia materna consiste en una buena higiene. Evita resecar los pezones hacia el final del embarazo enjabonándolos con exceso.

Dales masaje a diario, en el sentido de las agujas del reloj, con el mismo producto que hayas elegido para el resto del cuerpo: aceite de germen de trigo o de almendras dulces, por ejemplo. También puedes tirar a diario de los pezones, suavemente, a fin de hacerlos sobresalir durante unos minutos.

Todos esos cuidados específicos no son indispensables, pero quizá contribuyan a favorecer una lactancia sin problemas.

sábado, 24 de diciembre de 2011

Parto sin dolor


La mayoría de los médicos recomiendan por regla general a sus pacientes al comienzo del tercer trimestre del embarazo que sigan una serie de clases preparatorias para el parto sin dolor o psicoprofiláctico.

Esas clases, colectivas o individuales, las da una profesora, que suele ser también comadrona. También la Seguridad Social imparte para las mujeres con Cartilla de embarazada unos cursillos de preparación prenatal, totalmente gratuitos.

Tienen por objeto procurar a la mujer embarazada:

- En primer lugar, una preparación intelectual: cursillo de información sobre la fisiología del embarazo y del parto.

- En segundo lugar, una preparación psíquica, con el fin de desvanecer al máximo (en caso necesario) el temor al parto ya próximo.

- Por último, una preparación física, que comprende cuatro tipos de ejercicios:

— musculación;

— flexibilización;

— relajación (para saber relajarse durante las contracciones);

— los distintos tipos de respiración que se han de utilizar durante el parto.

Evidentemente, hay que repetir después esos mismos ejercicios en casa.
El mérito principal de esas clases consiste en infundir confianza a la mujer embarazada.

Cuanto más informada se está, menos miedo se tiene. La mujer empieza entonces a ser capaz de imaginar el parto: los síntomas anunciadores y los tres períodos del trabajo (dilatación, expulsión del niño y expulsión de la placenta). Durante el embarazo, oye contar tantas historias, cada una más edificante que la anterior, que al final ya no sabe distinguir entre lo real y lo falso.

Si la profesora que te da las clases de parto sin dolor es comadrona, sería ideal que estuviese presente durante el parto.

Así te asistiría, te ayudaría a adoptar sin asustarte los diferentes modos de respiración, a relajarte entre las contracciones, a empujar o a contenerte cuando sea necesario. En resumen, y como se dice comúnmente, a no perder la cabeza, lo que significa muchísimo.

Pero quizá has elegido otra manera de dar a luz. Esa discusión no es de mi incumbencia. Debe tener lugar entre el médico y tú. De todas formas, has de saber que existen varios métodos de atenuar, incluso de suprimir totalmente el dolor. Tienes derecho a elegir el que te convenga más, salvo, claro está, si hay imperativos de orden médico que imponen el recurso a otro.

jueves, 22 de diciembre de 2011

Dolor de espalda en el embarazo


El verdadero problema que se plantea a lo largo de todo el tercer trimestre, directamente vinculado al peso y al volumen del vientre, consiste en la aparición de dolores en la espalda a veces violentos.

Como suele decirse, se tiene dolor de ríñones.

A medida que el vientre aumenta de tamaño, se tiene tendencia a arquearse, a hundir los ríñones, a echar instintivamente los hombros hacia atrás para buscar un nuevo punto de equilibrio, para obligar a ese cuerpo, tan distinto de aquel con el que estamos acostumbradas a vivir, a adoptar una nueva postura.

Por desgracia, la posición que se elige al principio, sin darse cuenta, es muy pocas veces la buena. Al cabo de un momento, la espalda nos llama al orden. Y al sentirnos molestas, cambiamos de postura.

Has de saber que, cuanto más musculadas estén la banda abdominal y la espalda, cuanto más se haya flexibilizado la pequeña musculatura, muy profunda, de la columna vertebral, cuanto más se haya nadado, cuanto más regularmente se hayan practicado los ejercicios de gimnasia suave indicados, más conciencia se tendrá del propio cuerpo y menos molestará la región de las vértebras lumbares. Así se adopta de manera natural una buena postura.

martes, 20 de diciembre de 2011

Consejos de alimentación para embarazadas


- Cena de manera muy ligera.
En muchos casos, en cambio, las cenas resultan demasiado copiosas. No se precisan muchas calorías para dormir. Durante el sueño, se consumen muy pocas. Un exceso de calorías en la cena cuenta doble, y una comida ligera facilita el sueño.

- Come con tranquilidad.
Mucha gente come mal y con apresuramiento a mediodía. Mastica concienzudamente los alimentos (te dará la impresión de comer más) y relájate. Eso favorece la digestión.

- No comas entre horas.
Si tienes mucho apetito, tómate un yogur o cómete una manzana o una zanahoria. Ten cuidado con las chucherías, como una tostada de pan con mantequilla, unas cuantas galletas, ios caramelos, una pastilla de chocolate, etc. Suponen una mina de calorías escondidas. Sin darte cuenta, puedes llegar a doblar tu ración diaria de calorías y engordar dos kilos sin entender por qué. No andes picando entre horas. Hacerlo desajusta el equilibrio alimentario, sobre todo durante el embarazo.

- Cocina con la menor cantidad de grasa posible.
Una cocina demasiado grasa no beneficia al organismo. Aporta calorías superfluas y ocultas, que pueden ser perjudiciales. Aprovecha el hecho de estar embarazada para cambiar de costumbres dietéticas y alimenticias. Haz disfrutar de ellas a toda tu familia. Todo el mundo se sentirá mejor. El embarazo es la ocasión soñada para familiarizarse con la dietética.

- Reduce al máximo el consumo de azúcar.
Como ya he dicho, el azúcar —o los alimentos azucarados— llama al azúcar, con lo que se entra en un círculo vicioso. Cuanto más azúcar se toma, más necesidad se experimenta de él. En la medida de lo posible, suprime el azúcar de tu alimentación.
Mucho cuidado con las bebidas azucaradas, muy ricas en calorías. Todo lo azucarado hace engordar: galletas, chocolate, caramelos, todos los dulces, los helados, los pasteles... Naturalmente, no se trata de prohibir todo eso. Pero si tienes tendencia a engordar, considéralos como tus enemigos y no reemplaces nunca una comida por ellos. El volumen no tiene gran cosa que ver con el aporte calórico. Aprende a elegir tus alimentos con discernimiento. Así podrás preparar tu propio régimen, tomando en cuenta tus gustos y tus costumbres en materia de alimentación.

- Bebe por lo menos litro y medio de agua diarios.
Se pueden pasar algunas semanas sin comer, pero no se puede vivir más de tres días sin beber. Nuestras necesidades cotidianas se elevan a unos dos litros y medio de agua al día. Claro que, los alimentos que tomamos a diario nos proporcionan ya de por sí cerca de un litro de agua.

Para completar este aporte, se necesita litro y medio de bebida al día (una botella grande de agua mineral). En realidad, esta cantidad de líquido se distribuye entre el desayuno (té, café, leche, etc.) hasta la última bebida de la noche, pasando por la que se toma en las comidas y durante el resto del día.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Cuidado de dientes en segundo trimestre de embarazo


Segundo trimestre = segunda visita de comprobación al dentista. El embarazo requiere una vigilancia regular de la dentadura.

Por otra parte, si han empezado a tratarte la boca antes de quedar embarazada, nada te impide continuar. Si fuese necesaria una intervención importante, los únicos que pueden aconsejarte son el dentista y el ginecólogo.

Uno de los pequeños males que más me han hecho sufrir durante mis embarazos, sobre todo en las proximidades del segundo trimestre, es la gingivitis. A priori, parece algo sin importancia, pero en realidad te envenena la vida. Las encías se hinchan, se tensan, sangran por cualquier motivo y a veces duelen muchísimo. Ni pensar en morder una manzana ni en lavarse la boca con un poco de fuerza.

Para colmo, pueden aparecer aftas en la mucosa del interior de la boca. El embarazo causa con frecuencia este género de problemas, clásicos de él. La gingivitis desaparece de modo automático después del parto, y las aftas se alivian localmente mediante un gel prescrito por el médico. A veces ayudan también las gárgaras de agua tibia con un poco de agua oxigenada.

En todos estos casos, utiliza un cepillo de dientes muy suave.

Sabes que estás guapa y te sientes en plena forma. Eso no te autoriza a exagerar. Al contrario, aprovecha este período en que te hallas en estado de gracia para organizar tu vida cotidiana y aligerar poco a poco tus actividades. Mientras estás embarazada, no tienes la misma resistencia que antes. Sé prudente y cuídate a diario, tanto de ti misma como del niño que llevas en tu seno.

viernes, 16 de diciembre de 2011

El busto en el segundo trimestre


No hay ninguna novedad con respecto al busto durante el segundo trimestre. El volumen del pecho se hace estable. No pierdas las buenas costumbres adquiridas durante los tres primeros meses del embarazo.

- Lleva siempre un sostén confortable, bien adaptado al tamaño de tu pecho. Usalo de día y de noche si tienes el pecho demasiado voluminoso. La naturaleza no ha previsto músculos especiales para sostener el pecho durante el embarazo.

- Date masaje y más masaje cada día, en el sentido de las agujas del reloj, con una buena crema o con aceite de almendras dulces (o de germen de trigo). No olvides el pezón.

- Practica la gimnasia suave. La sesión incluye dos ejercicios destinados especialmente a fortalecer los músculos pectorales.

A partir del quinto mes, no te extrañe ver que, si presionas la punta de los senos, salen algunas gotas de un líquido ligeramente opaco y amarillento. Se trata del calostro segregado por las glándulas mamarias. Prepara la llegada de la leche. Cuanto más avance el embarazo, más cantidad saldrá espontáneamente. Lávate a fondo los pezones todos los días durante la ducha o el baño.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Alimentación en embarazadas con peso ideal


Régimen para embarazadas en peso ideal

En general, puedes estar en tu peso ideal por dos motivos: o bien porque tienes la suerte por naturaleza de comer todo lo que quieras sin engordar un gramo, o bien porque cuidas tu alimentación.

Si te encuentras en el segundo caso, no hay ninguna razón a priori para que te abandones durante el embarazo. Sigue mostrándote igual de vigilante y adopta el régimen n.° 2 si has aumentado demasiado de peso de una vez.

Regla general: aplícate el régimen básico (p. 58) y añádele:

— 80 g de queso diarios (nada más, debido a las grasas que contiene; haz la prueba siguiente: pon al sol un trozo de gruyere, por ejemplo, vuelve al cabo de una hora o dos y te encontrarás con aceite en lugar de queso);

— una rebanada de pan (con preferencia integral) por comida.

Atención: las 200 calorías suplementarias autorizadas al día no deben provenir de cualquier cosa, sino que han de estar constituidas por proteínas y calcio. 200 calorías de caramelos no le interesan ni a tus caderas ni al niño que estás gestando.

lunes, 12 de diciembre de 2011

La Piel en el segundo trimestre de embarazo


Aunque tengas una tez resplandeciente, luminosa, no descuides el cuidado de la cara. En este momento, la piel presenta una tendencia mayor que nunca a deshidratarse. De hecho, no hace más que reflejar lo que ocurre en el interior de tu cuerpo. Si te sientes en plena forma, tu cutis lo estará también. Pero si no le prestas atención, tal vez te encuentres un buen día con el cutis completamente deshidratado y reseco.

Desmaquíllate cuidadosamente todas las noches con una buena leche de belleza. A continuación, con ayuda de un algodón, pásate una loción tónica sin alcohol por toda la cara. Algunos especialistas recomiendan darse después un masaje suave a la cara con una buena crema alimenticia y conservarla durante toda la noche. (Cuidado con el contorno de los ojos)

La piel es particulamente frágil en este punto, y la crema puede provocar hinchazones anormales.) Otros dicen que hay que dejar que la piel respire durante toda la noche y que, de todas maneras, no se debe mantener una crema nutritiva sobre la cara más de veinte minutos, ya que su acción se anula después de ese lapso de tiempo. Si eliges esta segunda fórmula, aplícate, por ejemplo, la crema antes del desayuno y el baño (o la ducha) y retira después lo que no haya sido absorbido con un pañuelo de papel.

De todos modos, la crema nutritiva no reemplaza la base hidratante y protectora que llevarás durante el día, bajo el maquillaje si tienes la costumbre de maquillarte.

Atención: por el simple hecho del embarazo, puedes sufrir una alergia a una crema que habías estado usando hasta ahora. En ese caso, cambia de crema y elige productos analérgicos, ya sean de perfumería o de farmacia.

A mí me encanta, por las mañanas, antes de aplicarme la base hidratante, despertar mi cutis enjabonándolo —con un jabón transparente especial— mediante un cepillo muy suave, especialmente ideado para este objeto. Después, me enjuago con una buena cantidad de agua, primero tibia y luego fría. Es estupendo. Se acaba limpia y sonrosada.

Si estás acostumbrada a maquillarte, continúa haciéndolo. Atrae la atención sobre tu rostro. Es lo mejor que tienes durante el embarazo.

Piensa en acudir de vez en cuando a un instituto de belleza, para que te hagan una limpieza a fondo de la piel. Con eso, tu cutis estará más bello todavía.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Peluquería en embarazadas


En general, estará acorde con tu salud y con tu tez: brillante, suave, sedoso. Todos los peluqueros lo dicen: no hay ningún peligro de que se caiga hasta después del parto.

Trátalo bien desde ahora mismo. Uno o dos lavados de cabeza a la semana (no más) con un buen champú, y cepillados regulares con un cepillo suave.

Muéstrate prudente con las permanentes y los tintes. Pueden provocar alergias, e incluso no surtir ningún efecto. Pide consejo al peluquero. Sin duda te someterá a un «toque de ensayo» unos días antes para comprobar cómo reaccionas.

Mi peluquera opina que el embarazo no es un buen momento para emprender grandes —y tal vez irreversibles— cambios capilares. «Desconfíe de sí misma, de sus caprichos repentinos —me dijo—. Casi siempre son momentáneos y se deben al cambio que se está operando en usted. Cuanto más sencillo sea su peinado, más guapa estará.

Espere hasta dar a luz para saber si le sigue apeteciendo transformarse en punk o en bomboncito sexy.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Régimen embarazadas delgadas


Régimen para embarazadas delgadas

Es muy raro ver a una mujer embarazada demasiado delgada, pero sucede a veces.

Si este es tu caso, tendrás que:
Regla general: observar el régimen básico sin saltarte nada de nada. Añade a este régimen en cada comida:
— 5 cucharadas soperas de alimentos feculentos cocidos y salados, a los que pondrás un buen trozo de mantequilla cruda,
— 80 g de queso,
— galletas secas, si te apetecen.

Atención: las galletas suponen un suplemento. No hay que comerlas en lugar de otro alimento que te guste menos. Engordarías, cierto, pero no te alimentarías de modo conveniente.

Ten cuidado en no subalimentarte por coquetería, por no engordar demasiado. La subalimentación es peligrosa para el niño, claro está (peligro de nacimiento prematuro, con un retraso marcado en su crecimiento), pero también para la salud de la madre.
Si no engordas más de 10-12 kilos durante el embarazo, no tendrás ningún problema de peso después del parto, convéncete de eso.
En este momento, tienes una doble responsabilidad, la de tu persona y la de tu hijo. No te prives inútilmente.

Las cantidades de proteínas y de calcio contenidas en estos tres regímenes están perfectamente calculadas. No hagas lo que te venga en gana. Muy pronto sentirías los efectos. Se traducirían, por ejemplo, en un aumento de peso excesivo, que te costaría mucho trabajo dominar.

Y come diciéndote que todo lo que estás tomando es bueno para el niño. Una alimentación sana y equilibrada supone el primer regalo —y no el de menor importancia— que se hace al futuro hijo.

El segundo trimestre del embarazo causa muchos menos problemas determinados directa o indirectamente por la alimentación que el primero.

martes, 6 de diciembre de 2011

Deporte y caminatas en embarazadas


El hecho de que te sientas mejor, en plena posesión de todas tus facultades psíquicas, no significa que te permitas hacerlo todo. Una amiga mía esquió hasta el séptimo mes de embarazo. Siempre se ha vanagloriado de eso y, sin embargo, no había de qué pavonearse. ¿Y si llega a caerse?

Lo mismo que en el primer trimestre, los dos deportes recomendados a la mujer embarazada son la marcha y la natación.


Entiendo por marcha al andar a pie, es decir, ni participar en un maratón, ni dedicarse a mirar los escaparates. Procura caminar tranquilamente durante un cuarto de hora, por la mañana y por la tarde. Trata de encontrar un lugar en que puedas oxigenarte al máximo y no respirar el humo que sale de los tubos de escape.

Ten cuidado. Cuando emprendas una marcha, has de pensar siempre en el regreso. No presumas de tus fuerzas. Me acuerdo de que, durante mi segundo embarazo, salí sola a dar un gran paseo, tan fatigoso que creí que nunca conseguiría volver. No se veía un taxi libre, los autobuses iban atestados...Hubiese llorado de agotamiento.

domingo, 4 de diciembre de 2011

Luz verde en el Segundo Trimestre


¿Baños o duchas?
Como ya he dicho, no hay ninguna prohibición relativa a los baños o las duchas en este estadio del embarazo, sino al contrario. Tal vez experimentes la necesidad de refrescarte más a menudo, ya que la transpiración aumenta notablemente.

Prefiere la ducha al baño; es más tónica. Pero en contra de un bulo muy extendido, si deseas relajarte o si no consigues dormirte, no vaciles en darte un buen baño, ni demasiado caliente, ni demasiado frío, ni demasiado largo. Lo ideal es de cinco a diez minutos a 38 °.


El sueño
Durante este primer trimestre, te entrará sin duda con frecuencia un sueño irresistible. Sólo hay un remedio: duerme, duerme, duerme... No resistas al sueño.

Todo vuelve a la normalidad en el segundo trimestre. Acuéstate temprano. Pasa la noche tranquila y relajada, durmiendo por lo menos ocho horas. Si te es posible, echa la siesta después de comer. Ese reposo a mitad de la jornada resulta irreemplazable para evitar el cansancio y favorecer la digestión y la circulación.

La moda prenatal
No te plantea ningún problema. Teóricamente, no habrás engordado un gramo durante los tres primeros meses. Sigue llevando la misma ropa que antes.

viernes, 2 de diciembre de 2011

Consejos en Yoga para embarazadas


La serie de ejercicios que vamos a indicarte está destinada a procurarte nueve cosas esenciales:

- Toma de conciencia y mayor control de tu cuerpo.

- Buena respiración y aumento del volumen torácico.

- Mantenimiento de los músculos pectorales.

- Mantenimiento de los músculos del perineo y de su región.

- Flexibilización de la pelvis.

- Alivio de los posibles dolores en la espalda.

- Evitar el estreñimiento.

- Concentración.

- Descanso y relajación.

No olvides que, a partir del segundo trimestre, la respiración comienza a acelerarse. El corazón latirá con mayor rapidez al menor esfuerzo. Su cadencia debe aumentar para hacer circular una masa sanguínea mayor. No sobrepases tus posibilidades.