Entrada destacada

Bebés gemelos: Similares pero diferentes

 #bebés #bebésgemelos #padresdegemelos #consejossobrebebés #bebéscomportamiento La naturaleza es tan sabia que proporcionó nueve me...

Mostrando entradas con la etiqueta parto humanizado. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta parto humanizado. Mostrar todas las entradas

sábado, 7 de febrero de 2015

Parto Público y privado - Parto


 #parto #partopúblico #partohumanizado #partoprivado #partoencasa #sobreparto

La entrega en público y privado con y sin seguro de salud

Los procedimientos, conductas de hospitales y los derechos de las mujeres en relación con la entrega no difirieron en los hospitales públicos, plan privado o la salud. La diferencia radica en el poder de compra y el tipo de parto realizado.

Los hospitales privados son cada vez más como hoteles de lujo. Mientras tanto, cada vez es más común ver en público desde que la falta de camas, las mujeres en peregrinación por varios hospitales para encontrar un puesto de trabajo, la falta de recursos humanos, el trato inhumano y absolutamente sin ninguna estructura para atender a una mujer que está de parto hasta los hospitales de modelo con los programas Premios de humanización del parto.

Este es sólo un reflejo de la desigualdad social que impera en el país, convirtiendo a Brasil en el segundo país del mundo con la mayor brecha de ingresos.

Cesárea por alto en privado - Pero es el método de la entrega realizada por estos hospitales Esa es la gran diferencia. En la red privada, la tasa de cesáreas es de casi 80%. Las tasas más altas se encuentran en la red privada con seguro de salud.

Ya en los hospitales y maternidades de la red pública, las tasas de cesárea caen al 27,5%. Estos datos son nombrados por la Agencia Nacional de Salud (ANS), el organismo gubernamental que regula la actuación de los proveedores de seguros en el país.

Por la Organización Mundial de la Salud, la recomendación es que las cesáreas representan el 15% de los partos. Incluso en los hospitales públicos, Brasil tiene una muy alta tasa de partos por cesárea. Esto demuestra lo mucho que el país aún está lejos de proporcionar una atención de calidad a las mujeres.

Si el cálculo de la edad gestacional del bebé es de mala calidad, el parto por cesárea se hará antes de tiempo y el bebé nazca prematuro y puede causar complicaciones en el puerperio como trastornos respiratorios. Bebés 37-38 semanas tienen 120 veces más probabilidades de tener síndrome de dificultad respiratoria que esas 39 semanas. En un parto normal, usted está seguro de que está llegando a su debido tiempo.

El riesgo de muerte materna en los partos por cesárea aumentó en 2,8 veces en comparación con el parto vaginal. La madre también puede sufrir una hemorragia y la infección puerperal. Su recuperación tardará más tiempo que en el parto normal y su estancia en el hospital es mayor.

El parto por cesárea sólo debe realizarse en riesgo para la madre o el feto o el trabajo se extiende en exceso.

La elección de una cesárea - Las razones de la alta tasa de partos por cesárea son por conveniencia de la madre y el médico que controla la situación laboral, anotando día y hora para el nacimiento, a diferencia de un parto normal, donde la naturaleza determina el día y la hora .

Otra razón es financiera. Muchas instituciones privadas tienen que producir ganancias a expensas de la asistencia y por lo tanto c-sección es más rentable.

Haga que los médicos en Brasil están generalmente mal pagados, especialmente aquellos que están asegurados con planes de salud, por lo que necesitan para trabajar en más de un lugar. Por la prestación de servicios en varios lugares, no tienen tiempo para ser el seguimiento de las mujeres embarazadas en seis o más horas de trabajo de un parto normal.

Pago mediante pactos o incluso por los pacientes individuales es mayor con el parto por cesárea y más allá todo es más rápido. Así que el médico hace más entregas con mayor rentabilidad. Esto ya no es en el público, en el que el valor del pago de las entregas es el mismo para el normal y por cesárea.

Además de la comodidad, las mujeres prefieren el parto por cesárea por miedo del dolor del parto y los médicos ceden a la presión. Un buen prenatal aclarar todas las dudas y mitos, inseguridades y miedos de hora del parto con un obstetra para apoyar parto normal dará tranquilidad y seguridad para las mujeres en el momento de dar a luz y esto en sí alivia el dolor.

Pero si el dolor es insoportable parto vaginal, la madre puede pedir anestesia epidural donde las contracciones continúan, pero el dolor no se siente.

Como la necesidad de economía en público es grande, la tendencia es no abusar de la tecnología. Esta economía tiene beneficios para la madre y el bebé en el que es la naturaleza que tiene el control de la entrega y el médico está presente para el monitoreo y la intervención sólo si es necesario. Pero la principal razón de la caída en el número de cesáreas fue la acción tomada por el Ministerio de Salud para fomentar la creación de partos normales.

Los planes de salud podrían ayudar a revertir las altas tasas de cesáreas que ofrecen un mayor estímulo al médico tanto en el punto de vista financiero, más el pago de un parto normal, como en el aspecto humanización del nacimiento.

El médico debe indicar el tipo más adecuado de nacimiento de cada mujer y la madre debe aceptar o cuestionar la elección. Pero si una mujer embarazada puede tener a su hijo por vía vaginal y el médico indica cesárea, hay un desprecio por los derechos de las mujeres.

miércoles, 4 de febrero de 2015

Nacimiento humanizado


 #nacimiento #PartoHumanizado #parto #partonatural #sobreparto
La humanización del parto ya no significa una nueva técnica o más conocimiento, sino que respeta la fisiología del trabajo y de las mujeres.

Muchos hospitales y servicios médicos ignoran las regulaciones requeridas por la Organización Mundial de la Salud y el Ministerio de Salud, es por querer todo el control de la situación laboral, para la comodidad de los hospitales desocupar camas más rápidos o conveniencia de los médicos y las mujeres en el mundo actual no puede perder demasiado tiempo.

Pero la ciencia está demostrando que el exceso de intervenciones tecnológicas durante el parto pueden no ser tan seguro en los partos de bajo riesgo.

Se ha demostrado que las matronas son más seguros que los médicos en los partos de bajo riesgo, y que esta muy bajos centros de partos en casa riesgo de nacimiento o congénitos son tan seguras como las que se realizan en los hospitales y salas de maternidad, sin ninguna ventaja realizar muchas intervenciones, como la entrega es más natural.

El apoyo de la familia deja a la mujer más tranquilo en el trabajo, por lo que la entrega segura, al encontrar que el personal especializado de los hospitales no puede proporcionar el apoyo emocional que la madre necesita.

La posición de mentira reemplazó el parto vertical para un mejor control médico, pero la posición vertical es más seguro para la madre y el bebé, y es más rápido. La presencia del bebé con la madre después del parto es tan importante para el vínculo emocional de los dos de los ensayos realizados en el bebé después del nacimiento y lejos de la madre.

Más después del parto, la presencia del bebé en la sala de al lado de las madres es fundamental para el conocimiento tanto de mayor vínculo emocional y la lactancia prolongada. La leche artificial sustituye la leche materna y hay pruebas de que la lactancia materna es superior en sus cualidades.

Nacimiento Humanizar es dar libertad a las opciones de las mujeres, para proporcionar un servicio centrado en sus necesidades, y no en las creencias y mitos. El médico debe mostrar todas las opciones que una mujer tiene que elegir en base a la historia del desarrollo prenatal y fetal y seguir esas elecciones, interviniendo lo menos posible.

Es la mujer que debe elegir dónde tener el bebé, que acompañe o a su lado en el momento del parto y el alumbramiento, la libertad de movimiento antes de la entrega y lo que es la mejor posición en el nacimiento, el derecho a ser bien atendidos y la lactancia materna en la primera media hora de vida del bebé. Para ello, el cuidado prenatal es fundamental.

El dolor es visto como una función fisiológica normal que puede ser aliviado con métodos no farmacológicos ampliamente a tierra, pero no significa que las mujeres no tienen la opción de optar por el uso de la analgesia.

Esto no significa que el parto por cesárea o intervención médica no pueden humanizarse. La cesárea existe para salvar vidas, pero no debe ser la gran mayoría de los partos como lo es hoy, pero como último recurso. Esto también debe suceder con las intervenciones médicas que se deben aplicar sólo cuando sea necesario o cuando la elección de la mujer está bien orientado en cuanto a estas intervenciones.

El nacimiento humanizado significa dirigir toda la atención a las necesidades de la mujer y le dará el control de la situación en el nacimiento, que muestra las opciones para elegir, con base en la ciencia y los derechos que usted tiene.

lunes, 20 de octubre de 2014

Nacimiento humanizado


 #nascimiento #parto #partohumanizado #técnicasdeparto

La humanización del parto ya no significa una nueva técnica o más conocimiento, sino más bien el respeto de los partos y las mujeres.

Muchos hospitales y servicios médicos ignoran las regulaciones requeridas por la Organización Mundial de la Salud y el Ministerio de Salud, es por querer el control total de la situación de los partos por conveniencia de los hospitales desocupan más rápido o conveniencia de los médicos y las camas en las que las mujeres en el mundo actual no puede perder demasiado tiempo.

Pero la ciencia está demostrando que las intervenciones tecnológicas excesivas durante el parto pueden no ser tan seguros para partos de bajo riesgo.

Ya demostraron que las parteras son más seguros que los médicos en los partos de bajo riesgo, y que este riesgo muy bajo al nacer de la casa o casas de parto el parto son tan seguros como los realizados en los hospitales y maternidades, con la ventaja de no realizar muchas intervenciones desde el parto es más natural.

El apoyo de la familia deja a la mujer en trabajo de parto más tranquilo, lo que hace el parto más seguro, encontrando que el personal experto de los hospitales no puede proporcionar apoyo emocional a la parturienta necesita.

La posición de mentira reemplazó el parto vertical para un mejor control médico, pero los rectos es más seguro tanto para la madre como para el bebé, además de ser más rápido. La presencia del bebé con la madre después del parto es tan importante para el vínculo emocional que los dos de los ensayos realizados en el bebé después del nacimiento y lejos de la madre.

Más de posparto, la presencia del bebé en la habitación contigua a conocimiento de las madres es fundamental para ambos mayor vínculo emocional y la lactancia materna prolongada. La leche artificial sustituye a la leche materna y hay pruebas de que la lactancia materna es superior en sus cualidades.

Humanizar el parto es dar libertad a las opciones de las mujeres, proporcionar servicios enfocados en sus necesidades, no en las creencias y mitos. El médico debe mostrar todas las opciones que una mujer tiene que elegir en base a la historia del desarrollo prenatal y fetal y acompañar a estas elecciones, que intervienen lo menos posible.

Es la mujer que debe elegir dónde tener el bebé, que quiere un compañero a su lado en el momento del parto y el alumbramiento, la libertad de movimiento antes del nacimiento y en qué posición es mejor en el momento del nacimiento, el derecho a ser bien atendidos y la lactancia materna en la primera media hora de vida del bebé. Para esto, es esencial prenatal.

El dolor es visto como una función fisiológica normal que puede ser aliviado con métodos no farmacológicos ampliamente a tierra, pero no significa que la mujer tiene la opción de no optar por el uso de la analgesia.

Esto no significa que el parto por cesárea o con la intervención médica no puede ser humanizado. Existe la cesárea para salvar vidas, pero no debe ser la gran mayoría de los nacimientos como lo es hoy, pero como último recurso. Esto también debería ocurrir con las intervenciones médicas sólo deben aplicarse cuando sea necesario o cuando la elección de la mujer está bien informado acerca de estas intervenciones.

domingo, 21 de septiembre de 2014

Parto en casa: derechos reproductivos y la evidencia


El parto en casa es una opción segura para las mujeres embarazadas de bajo riesgo atendidos por profesionales capacitados y es derecho de la mujer.

"La humanización del parto no es una vuelta romántica al pasado, ni una devaluación de la tecnología. En su lugar, ofrece un sendero ecológico y sostenible para el futuro. "Ricardo Herbert Jones

El debate sobre el lugar de entrega debe basarse esencialmente en dos niveles: el respeto a la autonomía y el papel femenino, ya que la elección del lugar de nacimiento es un derechos reproductivos básicos; y el reconocimiento y la correcta interpretación de las pruebas que comparan la partos domiciliarios y partos hospitalarios en mujeres embarazadas de bajo riesgo.

No entiende en la actualidad el proceso más decisiones basadas únicamente en las concepciones y experiencia del proveedor de decisión de atención, ya que, por definición, la Medicina Basada en la Evidencia es la integración armoniosa de la experiencia clínica individual con la mejor evidencia científica disponible actualmente y las características y expectativas de los pacientes.

A pesar de la posición contraria de algunos consejos regionales de Medicina y la Federación Brasileña de Sociedades de Obstetricia y Ginecología (Febrasgo), que han sido desalentadores sistemáticamente el parto en casa, debemos hacer hincapié en que tanto la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Federación Internacional de Ginecólogos y Obstetricia (FIGO) respetar el derecho de elección del lugar de nacimiento de las mujeres y reconocer que, cuando la asistencia de profesionales calificados, existen considerables beneficios para las mujeres que quieren y pueden tener partos en el hogar.

La OMS reconoce como profesionales cualificados para asistir al nacimiento médica tanto como enfermeras-parteras y obstetras y recomienda que las mujeres pueden optar por tener sus partos en casa si tienen embarazos de bajo riesgo, recibirá el nivel adecuado de atención y formular planes transferencia de contingencia para un centro de atención de la salud está adecuadamente equipado surgen problemas durante el parto (1-3). A su vez, la FIGO recomienda que "una mujer debería dar a luz en un lugar donde se siente seguro y en el nivel más periférico en el que la atención adecuada es factible y seguro" (4).

Otras empresas del mundo, como el Colegio Americano de Enfermeras Parteras (5), la Asociación Americana de Salud Pública (6), el Real Colegio de Matronas (RCM) y el Colegio Real de Obstetras y Ginecólogos (RCOG) (7) apoyar la prestación hogar para mujeres con embarazos sin complicaciones. De acuerdo con la directriz de la CRM y RCOG, "no hay ninguna razón por qué el parto en casa no se ofrece a las mujeres de bajo riesgo, ya que puede conferir beneficios considerables para ellos y sus familias" (7).

domingo, 12 de junio de 2011

Parto Humanizado


La humanización está a la orden del día. Se desea humanizar los hospitales (en todo caso, se habla de ello desde hace tiempo), así como también se desea humanizar la muerte, tema que abordan, con justa razón, tanto los grandes pensadores como los grandes médicos. Pienso que sería lícito empezar por el principio, es decir humanizando el nacimiento.

El método del parto psicoprofiláctico, denominado «parto sin dolor» (PSD), constituyó la primera etapa importante en la vía de la humanización del nacimiento. Tras haber sufrido pasivamente el parto, entre gritos y dolores, durante siglos, la mujer occidental se benefició, hace varias décadas, de una verdadera revolución psicológica: la mujer moderna participa al fin, en tanto que adulta consciente, informada y preparada, en el maravilloso acto de dar la vida.

Al mismo tiempo, las angustias y dolores ancestrales han desaparecido o se han mitigado considerablemente. Como ya he dicho, ese cambio ha sido posible gracias a la intuición genial de un modesto tocólogo inglés, el doctor Read, y a los trabajos de los fisiolo-gistas rusos.

¿Cuál ha sido la reacción del cuerpo médico ante esas nociones nuevas? Por desgracia, y como tan a menudo ocurre cuando se habla del dominio psicológico, la ironía y el desinterés. Sólo gracias a la presión de la prensa y de la opinión pública, el cuerpo médico lia acabado por adoptar esos métodos, los cuales han tardado casi veinte años en pasar a formar parte de la práctica cotidiana. En la actualidad, todas las futuras madres se benefician de esa preparación, que supone una auténtica humanización del parto.

El «método» Leboyer (pongo «método» entre comillas porque, como veremos, se trata más de un estado mental que de un método propiamente dicho) parece completar de maravilla al parto sin dolor.

martes, 12 de abril de 2011

El Parto


El Parto propiamente dicho

Al término de su descenso a través de la pelvis, la cabeza tropieza con la base perineal, lo que origina las ganas de empujar.

La expulsión constituye la fase activa del parto; activa por lo que respecta a la mujer, que «empujará» a cada nueva contracción, y activa por lo que respecta a la comadrona o el partero, quien guiará y controlará la salida del niño, para evitar cualquier desgarro perineovaginal.

Debo señalar, sin embargo, que ciertos parteros, partidarios de la vuelta al parto natural y convencidos de la necesidad de una reducción de los factores médicos en el nacimiento, evitan sistemáticamente intervenir en la salida de la cabeza del niño, dejando que ésta se produzca de manera espontánea.

Si bien esta actitud es a veces aceptable en el caso de las multíparas, de perineo flexible, el riesgo de desgarro me parece importante en las primerizas, o en el caso de un perineo rígido o cicatrizal. No olvidemos que en el pasado los desgarros perineales eran frecuentes, y a veces graves, y que si hoy raramente se producen se debe sobre todo a la práctica de la episiotomía.

Pese a que esté de acuerdo en que es necesario reducir los factores médicos en el embarazo y el parto, en los que se cometen fla-grantes excesos cientificistas, creo sin embargo que no hay que caer en el extremo opuesto. Por lo tanto, me declaro partidario de que el partero controle la salida de la cabeza del niño, en especial en el caso de las primerizas.

Esa salida controlada es pues la que voy a describirte a continuación.

A medida que se realizan los esfuerzos expulsivos, la cabeza, en su descenso, distenderá progresivamente la vulva. Es debido a esla distensión —que podría originar un desgarro si fuese demasiado exagerada o demasiado brutal— por lo que el partero debe guiar y controlar la cabeza en su salida de la vulva. Para controlarla, tratará de «asirla» a través del perineo, que se ha hecho más tino.

Una vez que la mano derecha del partero (con el índice doblado en forma de gancho) ha logrado «enganchar» la nariz o la respiración superficial (corta y rápida), y se relajará por completo.

Una vez ha salido la cabeza, el partero procede a sacar el resto del cuerpo. La cabeza se lleva con suavidad hacia abajo, a fin de proceder a la extracción del hombro y el brazo. Una tracción hacia arriba permite a continuación sacar el otro hombro y el otro brazo. El resto del cuerpo sale sin ninguna dificultad.

En lo que al niño se refiere, la actitud del partero difiere según éste aplique el método clásico de alumbramiento o, por el contra rio, sea partidario del nacimiento sin violencia.

En los capítulos siguientes te explicaré en qué consisten ambos métodos.

jueves, 31 de marzo de 2011

El Parto - Preparación Física


Preparación física

Los objetivos de la preparación física son mantener en buenas condiciones físicas a la mujer encinta y darle a conocer técnicas musculares y respiratorias que le serán útiles en el parto.

Dicha preparación comprende un determinado número de ejercicios, que dividiré en cuatro categorías de modo algo arbitrario:

1. Ejercicios de relajación.

2. Ejercicios respiratorios.

3. Ejercicios de flexibilidad.

4. Ejercicios musculares.

Veremos cómo ciertos ejercicios ganan con la práctica, no sólo antes del parto, sino también en el período que sigue a éste.
Al principio, es casi indispensable que hagas la gimnasia bajo el control de tu monitora de preparación para el parto.

Pero quede claro que las sesiones de gimnasia dirigida no bastan; su ritmo no podría rebasar una o dos veces por semana, mientras que una buena preparación debe comprender un entrenamiento físico cotidiano. Debes pues repetir en tu casa, cada día, en una o dos sesiones no demasiado largas, los ejercicios que hayas aprendido en el curso. Evidentemente, estas sesiones diarias no deben fatigarte, lo que sería contrario al objetivo buscado; una duración de un cuarto de hora a veinte minutos se considera suficiente.

Es el momento de que tu marido te ayude, colaborando así en tu preparación para el nacimiento de vuestro hijo. Lo habéis concebido juntos, es obra de los dos, por lo que debéis preparar juntos su venida al mundo. Tu marido no debe limitarse a pagar las facturas de la canastilla y la cuna, sino que también él debe preparar la llegada del recién nacido, no sólo arreglando la habitación del bebé o eligiendo su primer tren eléctrico, sino sobre todo comprendiendo lo que ocurre y va a ocurrir dentro de ti, y ayudándote moral y físicamente a prepararte para ello.

Insisto, ese hijo lo habéis hecho entre los dos, y con todo vuestro amor debéis preparar los dos su venida al mundo.

martes, 29 de marzo de 2011

La Preparación para el Parto


La preparación para el parto puede ser emprendida a partir del sexto o séptimo mes del embarazo.

Normalmente, dicha preparación supone un cierto número de Sesiones (de 6 a 8), reuniendo de cuatro a seis mujeres encinta en torno a una comadrona. Es muy conveniente la presencia del marido en esas sesiones, pues como ya he dicho, tanto el embarazo como el nacimiento deben ser preparados y vividos entre los dos.

Cada sesión se divide en tres partes:

— una primera parte teórica, que describe, con ayuda de esquemas o películas, las nociones anatómicas básicas, así como el mecanismo y el desarrollo del nacimiento;

— una segunda parte de ejercicios prácticos, donde se explican y ejecutan los diversos movimientos respiratorios, de relajación y gimnásticos descritos más adelante;

— una tercera parte de conversaciones libres, en la que se establece entre las participantes una libre discusión sobre cualquier lema que deseen abordar, que haga referencia de un modo u otro al nacimiento, al hijo, a la mujer.

Lo ideal sería que se pudiera añadir a esas sesiones reuniones periódicas con un psicólogo, a fin de abordar los componentes psíquicos del «mito» del parto, ya que, junto con la preparación física, es muy importante la preparación intelectual y psicológica

Como ya he indicado, su objetivo principal es hacer desaparecer el temor eliminando el misterio.

Eliminar el misterio supone proporcionarte algunas nociones esenciales e indispensables sobre tu anatomía y sobre el funcionamiento de tus diversos órganos, a fin de que puedas comprender mejor lo que va a ocurrir dentro de ti.

Dicho esto, hay un punto sobre el que quiero insistir ante todo: el hecho de que asistas regularmente a las clases no debe hacerte pensar que abordarás el alumbramiento sabiendo obstetricia (a modo de comparación, quiero recordarte que las comadronas requieren tres años de difíciles estudios para adquirir los conocimientos pertinentes).

La finalidad de esos cursos es que comprendas lo que acontece dentro de ti en el curso del embarazo y el parto, pero esos conocimientos, forzosamente elementales y esquemáticos, son insuficientes para permitirte analizar una situación obstétrica real.

Es absolutamente necesario que asimiles bien ese hecho, ya que imaginando que lo sabes todo correrías el riesgo de desorientarte al contacto con la realidad; tal desorientación podría hacerte perder todos los beneficios obtenidos durante la preparación.

sábado, 26 de marzo de 2011

Preparación del Parto - Método Pavloviano


El método pavloviano

De origen soviético, el método denominado psicoprofiláctico pretende ser absolutamente científico, basado en la fisiología experimental del sistema nervioso. Ésa es la razón de que apele a los trabajos del fisiólogo Pavlov.

Se trata de un concepto del dolor en el que los reflejos condicionados juegan un papel primordial.

Por una parte, los reflejos condicionados han provocado en la mujer la noción de parto igual a dolor, como lo demuestra el adagio del Génesis: «Parirás con dolor».
Así pues, se trata de erradicar ese condicionamiento creando nuevos reflejos condicionados que asocien la idea del alumbramiento a nociones positivas y de felicidad, es decir, a la alegría de la maternidad.

Además de los reflejos condicionados, la teoría pavloviana se propone utilizar ciertos datos de fisiología cerebral: la percepción del impulso nervioso procedente del útero depende evidentemente del cerebro, que desempeña el papel de «catalizador».Según su estado, ese analizador puede recibir un mensaje nervioso e interpretarlo como dolor, mientras que en otras circunstancias el mismo mensaje nervioso se interpreta como una sensación no dolorosa.

Por lo tanto, se trata de modificar el comportamiento del analizador cerebral en el sentido que nos interesa. ¿Cómo lograrlo?

Si admitimos que el dolor no constituye tan sólo una percepción sino también una reacción emotiva, se comprenderá que el contexto emocional y fisiológico es capaz de influir en la interpretación del analizador: las actitudes de una mujer emotiva, angustiada y pasiva serán actitudes negativas que favorecerán el dolor; por el contrario, la calma, la participación activa, la convicción de que la maternidad no es una condena sino una alegría de índole personal y social son actitudes positivas que favorecen la eliminación del dolor.

Un tercer descubrimiento de Pavlov, el de los fenómenos de inhibición cerebral, se utiliza también en el método psicoprofiláctico; una intensa actividad de una zona cerebral dada parece crear alrededor de dicha zona un área de inhibición o de silencio cerebral.

Manteniendo deliberadamente una actividad cerebral suficiente una sensación dolorosa puede desaparecer si se encuentra en la zona de inhibición. Así pues, no sólo se trata de «distraer» a la mujer, sino de sacar provecho de una determinada propiedad de la fisiología cerebral.

Tales concepciones conducen pues a una preparación intelectual y moral de la mujer, pero también a la creación de un medio obstétrico distinto, en el que pueda tener parte muy activa durante el alumbramiento.

viernes, 25 de marzo de 2011

El Parto - Preparación Psicológica


Preparación psicológica

Por supuesto, la preparación psicológica es inseparable de la preparación intelectual. El hecho de que te hayan puesto al corriente de los fenómenos fisiológicos del embarazo y el parto debe llevarte a desechar ciertos prejuicios, y en especial a rechazar ciertos temores, confesados o inconfesados; cuando desaparece el misterio desaparece la angustia, y esa victoria sobre la angustia debería ser el primer resultado psicológico de una preparación eficaz.

Durante las clases y las charlas subsiguientes, el partero, o la comadrona monitora, deben completar la preparación psicológica creando una atmósfera de tranquilidad y comprensión, y esforzándose en suprimir los condicionamientos que hacen del alumbramiento una prueba humillante y dolorosa, una servidumbre, una punición. Dichas nociones negativas deben ser reemplazadas por nociones positivas, la principal de las cuales es la siguiente: gracias a la preparación, eres capaz de modificar por ti misma tus relaciones «cerebroviscerales», a fin de volver más fácil el parto. En lugar de sufrir pasivamente, te vuelves activa, pues tienes un papel que jugar.

De modo general, se puede decir que la preparación sirve para que tomes una actitud adulta y responsable frente al acto de poner un hijo en el mundo, acto que, repitámoslo, es perfectamente normal, mas sin embargo tiene un cierto carácter excepcional con respecto a los demás actos de la existencia.

Una preparación lograda implica asimismo una transformación ile las relaciones entre tu partero y tú. La actitud del partero ya no debe ser paternalista («no se ocupe de nada, no intente comprender, tenga confianza en mí»); del mismo modo, tu actitud ya no debe ser una regresión de tipo infantil.

Por supuesto, una preparación bien llevada no anulará la confianza que debes depositar en la persona que te atienda en el parto; al contrario, se tratará de una confianza razonada que te llevará a participar activamente y a colaborar en el éxito del parto.

La preparación psicológica sería incompleta si no comprendiera lambién una toma de contacto con los locales y con el personal de la sala de partos; conocer el lugar y conocer a las comadronas y enfermeras es otro medio de eliminar la ansiedad.

Es aconsejable que visites una sala de partos, que veas, en su marco real, la cama de obstetricia y los instrumentos que concurren para lograr tu seguridad y la de tu hijo (material de reanimación, incubadora, etc.).

Las nociones de seguridad y calma, en relación con los mismos lugares en que tiene lugar el alumbramiento, me parecen un factor importante en la preparación psicológica, pues vas a adquirir esa seguridad por ti misma, en contacto con la realidad y no simplemente por mediación de la monitora.

jueves, 24 de marzo de 2011

Preparación del Parto - Método Read


El método Read

Ninguna obra sobre el alumbramiento puede dejar de referirse a la iluminación que tuvo Read mientras atendía un parto en una mísera vivienda de Whitechapel, donde, conmovido por la actitud de la parturienta, tuvo la revelación de que «aquello no debía de doler».

Tal es en efecto la idea inicial sustentada por Read: el parto es un fenómeno fisiológico normal, y como tal no tiene por qué ser doloroso. Para Read, el dolor debe ser considerado siempre como una señal de alarma que manifiesta alguna anormalidad.
¿Cuál es entonces la razón de que las mujeres sufran en el curso de un parto normal?

En primer lugar, y ante todo, porque tienen miedo: miedo de lo desconocido que todo alumbramiento supone, miedo también a causa de la tradición firmemente establecida que hace que cada madre cuente a su hija, a fin de «instruirla» y con todo lujo de detalles, los horribles dolores de sus propios partos (con igual secreto orgullo que el padre cuando narra sus campañas militares).

Ese temor origina lo que Read denomina «tensión»: tensión tísica, de los músculos de la zona abdominopélvica, primera causa de dolor; tensión psicológica también, que intensifica aún más los fenómenos dolorosos.

Así pues, la tensión, provocada por el temor, es la causa directa del dolor, por irritación de las numerosas terminaciones sensitivas existentes en la pelvis y en el útero.

De ahí la célebre tríada: temor = tensión = dolor, que resume las concepciones de Read.

Partiendo de esa base, Read elabora del modo más empírico un método de preparación que se propone suprimir el dolor suprimiendo el temor y la tensión. Para suprimir el temor emplea la educación (que elimina el factor de desconocimiento) y, en cierta medida, la sugestión. Para suprimir la tensión preconiza la tranquilidad voluntaria, es decir, la relajación.

miércoles, 23 de marzo de 2011

Estudiando al Parto - Parte 2



La imagen de la madre había desaparecido definitivamente.

La mujer moderna se halla a solas con su miedo, frente a la ciencia, ,i sus máquinas electrónicas y al hombre vestido de blanco.

Esta nueva teoría explica a la perfección los excelentes resultados obtenidos con el método de preparación psicoprofi láctica para el parto, más conocido por la impropia denominación de preparación para el parto sin dolor (PSD).

Antes de hablarte de las dos corrientes de pensamiento (Read y Pavlov) que han conducido al PSD tal como se suele practicar en la actualidad, querría señalar otra deducción que se desprende de la Icoría de las compuertas.

El cerebro parece ser capaz de reajustar el nivel a partir del cual se inhibe el dolor. Parecería que cuanto más se lucha contra el dolor, más se retarda el cierre de la compuerta; y cuanto mayor es la aceptación del dolor, más se favorece el cierre de la misma y con él la desaparición del dolor.

Nos parece más cierto, médica y científicamente hablando, admitir que las contracciones uterinas del parto son fisiológicas y no deberían ser dolorosas —ya que el dolor no se halla inscrito a nivel genético—, y que la sensación ligada a la percepción de la contracción uterina ha sufrido una modificación, una perturbación de orden cerebral.

El útero puede sufrir, al igual que oíros órganos internos —como el estómago por ejemplo—, influencias externas e internas que modifican su trabajo y modifican asimismo, a nivel cerebral, la traducción, la integración de la percepción de las excitaciones de que es objeto; tales influencias externas e internas son capaces de perturbar las sensaciones que van del útero al cerebro, y viceversa. [...] Nos parece que el dolor de la parturienta no es sino la expresión de la huella mnésíca o de la pantalla de una potente angustia inscrita en un cierto nivel superior de su cerebro. Nos parece incluso que ese dolor representa a ¡a vez la expresión y la pantalla de la angustia de la muerte y de un sentimiento femenino de culpa.

martes, 22 de marzo de 2011

Estudiando al Parto - Parte 1



La mujer, en el momento del parto, siempre reclama a su madre. Ya se trate de un hombre o de una mujer, se recurre a la madre en cualquier momento dramático de la vida, cuando el ser humano se halla atormentado por el sufrimiento o la muerte; el guerrero que muere en el combate llama a su madre, la mujer que da a luz. busca la reconfortante presencia de la suya. El amor materno supone protecCión, calor, solicitud; es incondicional, último refugio del desposeído, del desgraciado, del débil.

El hombre herido en combate se halla débil y desposeído, perdido, como débil, perdida y desposeída se encuentra la mujer que pare. Durante mucho tiempo, el parto ha representado para la mujer lo que el combate para el hombre, lo que aún representan a veces las «obligaciones militares»: algo ineludible, que auna la idea de deber, de sacrificio y de sufrimiento.
Antiguamente, el ruego de la parturienta era atendido; era su madre quien la asistía, o en su defecto una sustituía de la madre, una prima, abuela o pariente.

Apoyada en las rodillas de esa mujer de más edad, puesta en cuclillas sobre las dos piedras ancestrales que aún están presentes en muchas tradiciones, la madre del alba de la humanidad daba a luz a su hijo.

Más tarde, a fuerza de acumular experiencias y de asistir a un nacimiento tras otro, esas mujeres mayores que asistían a las parturientas, esas «matronas» adquirieron ciertos conocimientos. Entonces se las buscó con preferencia, debido a que estaban más habituadas, a que tabían (de ahí que en francés se las denomine sage-femme, «la que sabe») y su presencia era tranquilizadora.

A lo largo de los siglos, el concepto de «la que sabe» prevaleció sobre el de «la que representa a la madre», para desembocar en el siglo XVIII en la total preeminencia del conocimiento y la ciencia sobre el sentimiento, sobre la humanización.
Era terreno abonado para la eclosión de la imagen aún más prestigiosa del partero, el que sabe todavía más, el que conoce la medicina y la cirugía, y cuyos tímidos comienzos, a fines del siglo XVIII, desembo-caron finalmente en la supremacía absoluta en el siglo actual.