¿RUBIO O MOROCHO?
Como ya dijimos un feto es portador de 23 cromosomas procedentes de la madre y de otros 23 procedentes del padre. Estos se organizan formando parejas.
Los genes de cada par de cromosomas pueden ser dominantes o recesivos. Dominante es aquel que se manifiesta siempre (por ejemplo, los ojos y cabellos oscuros). Recesivo es el que pasa inadvertido en presencia del dominante (como los ojos azules y el cabello rubio).
El gen recesivo sólo tiene efecto cuando se une con otro recesivo, es decir un individuo tendrá la característica correspondiente si la hereda de ambos progenitores. Puede que no se manifieste en sus padres, si en ellos va escondida tras un gen dominante.
El color de la piel depende de varios genes, lo que explica la gran variedad de tonalidades que puede adoptar. La estatura responde a más genes aún lo que hace todavía más complejo su estudio.
Sin embargo, aislando factores de tipo ambiental como la alimentación y la salud, los genetistas consideran que la estatura está genéticamente determinada en un 80 por ciento.
Como ya dijimos un feto es portador de 23 cromosomas procedentes de la madre y de otros 23 procedentes del padre. Estos se organizan formando parejas.
Los genes de cada par de cromosomas pueden ser dominantes o recesivos. Dominante es aquel que se manifiesta siempre (por ejemplo, los ojos y cabellos oscuros). Recesivo es el que pasa inadvertido en presencia del dominante (como los ojos azules y el cabello rubio).
El gen recesivo sólo tiene efecto cuando se une con otro recesivo, es decir un individuo tendrá la característica correspondiente si la hereda de ambos progenitores. Puede que no se manifieste en sus padres, si en ellos va escondida tras un gen dominante.
El color de la piel depende de varios genes, lo que explica la gran variedad de tonalidades que puede adoptar. La estatura responde a más genes aún lo que hace todavía más complejo su estudio.
Sin embargo, aislando factores de tipo ambiental como la alimentación y la salud, los genetistas consideran que la estatura está genéticamente determinada en un 80 por ciento.