¿Qué es el factor Rh?
Como es sabido, existen cuatro grupos sanguíneos: A, B, AB y O, y cada individuo pertenece a uno de ellos. Junto a esos factores, existe otro, el llamado factor Rh: un 75 % de personas pertenecen al grupo Rh positivo, y un 25 % al grupo Rh negativo. El análisis de sangre que sin duda te habrás hecho al comienzo del embarazo te habrá permitido saber tu grupo sanguíneo completo, es decir, el grupo ABO y el Rh al que perteneces.
El factor Rh adquiere su importancia ante la posibilidad de que sobrevengan complicaciones en el curso del embarazo, cuando coinciden ciertas circunstancias muy poco comunes. A fin de tranquilizarte, te diré que los accidentes debidos al Rh son excepcionales, y además acabarán desapareciendo por completo, gracias a la «vacuna anti-Rh», utilizada desde hace algún tiempo.
Tales accidentes sólo sobrevienen en condiciones especiales:
— cuando la madre es Rh negativo y el padre Rh positivo. No hay nada qué temer en los restantes casos;
— cuando la madre Rh negativo ya ha sido sensibilizada antes del embarazo, sea por un embarazo anterior, en el que el niño era Rh positivo, sea por una transfusión de sangre de este factor. Si se trata de un primer embarazo, o si la madre se ha beneficiado con la vacuna anti-Rh en sus precedentes embarazos, no hay que temer ningún accidente.
Así pues, sólo existe riesgo de accidentes en casos raros:
— madre Rh negativo, padre Rh positivo;
— madre Rh negativo que haya tenido hijos Rh positivo y que no se haya vacunado, o bien que se haya efectuado una transfusión de sangre Rh positivo.
Además, para que hubiera un accidente, el hijo que lleva en su interior debería ser Rh positivo. Vas a comprender por qué.
Cuando una madre Rh negativo lleva en ella un hijo Rh positivo, se produce, con ocasión del nacimiento, el paso de una cierta cantidad de sangre del niño a la circulación sanguínea de la madre. Así, sangre Rh positivo penetra en el organismo materno, sensibilizándolo a la sangre Rh positivo.
En un posterior embarazo pueden ocurrir dos casos:
1. Que la madre lleve en ella un hijo Rh negativo, es decir de su mismo grupo, en cuyo caso no hay motivo de temor.
2. Que el niño sea Rh positivo. En tal caso, el organismo materno, sensibilizado contra el grupo Rh positivo, atacará a los glóbulos rojos de ese factor, o sea a los glóbulos rojos de su hijo.
El factor Rh adquiere su importancia ante la posibilidad de que sobrevengan complicaciones en el curso del embarazo, cuando coinciden ciertas circunstancias muy poco comunes. A fin de tranquilizarte, te diré que los accidentes debidos al Rh son excepcionales, y además acabarán desapareciendo por completo, gracias a la «vacuna anti-Rh», utilizada desde hace algún tiempo.
Tales accidentes sólo sobrevienen en condiciones especiales:
— cuando la madre es Rh negativo y el padre Rh positivo. No hay nada qué temer en los restantes casos;
— cuando la madre Rh negativo ya ha sido sensibilizada antes del embarazo, sea por un embarazo anterior, en el que el niño era Rh positivo, sea por una transfusión de sangre de este factor. Si se trata de un primer embarazo, o si la madre se ha beneficiado con la vacuna anti-Rh en sus precedentes embarazos, no hay que temer ningún accidente.
Así pues, sólo existe riesgo de accidentes en casos raros:
— madre Rh negativo, padre Rh positivo;
— madre Rh negativo que haya tenido hijos Rh positivo y que no se haya vacunado, o bien que se haya efectuado una transfusión de sangre Rh positivo.
Además, para que hubiera un accidente, el hijo que lleva en su interior debería ser Rh positivo. Vas a comprender por qué.
Cuando una madre Rh negativo lleva en ella un hijo Rh positivo, se produce, con ocasión del nacimiento, el paso de una cierta cantidad de sangre del niño a la circulación sanguínea de la madre. Así, sangre Rh positivo penetra en el organismo materno, sensibilizándolo a la sangre Rh positivo.
En un posterior embarazo pueden ocurrir dos casos:
1. Que la madre lleve en ella un hijo Rh negativo, es decir de su mismo grupo, en cuyo caso no hay motivo de temor.
2. Que el niño sea Rh positivo. En tal caso, el organismo materno, sensibilizado contra el grupo Rh positivo, atacará a los glóbulos rojos de ese factor, o sea a los glóbulos rojos de su hijo.