La relación útero-cerebro
Hemos mencionado antes que nuestro cerebro estaba informado de todo lo que pasaba en nuestro interior por las excitaciones que partían de cada órgano y que a su vez el cerebro era capaz de influir en el funcionamiento de los órganos, modificándolo, alterándolo.
De qué manera el cerebro modifica o altera el funcionamiento del útero durante el trabajo de parto
Veamos primero lo que pasa en el útero.
Para que la dilatación se produzca es necesario que mientras el cuerpo, que es el verdadero motor del parto, se contrae, el cuello se deje dilatar. Es decir: encontramos en un mismo órgano que el cuerpo tiene una actividad diferente del cuello.
Esta relación cuerpo-cuello es mantenida por nuestro sistema nervioso. Para que ella se mantenga inalterable durante el trabajo de parto, es necesario que los mecanismos de control funcionen normalmente. Un sistema nervioso agotado, cansado, controla mal y puede provocar modificaciones en la función.
Hemos mencionado antes que nuestro cerebro estaba informado de todo lo que pasaba en nuestro interior por las excitaciones que partían de cada órgano y que a su vez el cerebro era capaz de influir en el funcionamiento de los órganos, modificándolo, alterándolo.
De qué manera el cerebro modifica o altera el funcionamiento del útero durante el trabajo de parto
Veamos primero lo que pasa en el útero.
Para que la dilatación se produzca es necesario que mientras el cuerpo, que es el verdadero motor del parto, se contrae, el cuello se deje dilatar. Es decir: encontramos en un mismo órgano que el cuerpo tiene una actividad diferente del cuello.
Esta relación cuerpo-cuello es mantenida por nuestro sistema nervioso. Para que ella se mantenga inalterable durante el trabajo de parto, es necesario que los mecanismos de control funcionen normalmente. Un sistema nervioso agotado, cansado, controla mal y puede provocar modificaciones en la función.
