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Bebés gemelos: Similares pero diferentes

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domingo, 2 de octubre de 2011

Ejercicio Mental para Bebés


Preparación para el razonamiento abstracto primario: jugar con objetos que se diferencian en una sola característica. Las experiencias han demostrado que el niño de seis meses es capaz de acciones que requieren en los adultos la facultad de trabajar con abstracciones.

El juego siguiente prepara el terreno para el desarrollo de esta facultad. Da en diversas ocasiones a tu hijo varios objetos similares, que se diferencien en un solo aspecto, por ejemplo dos o tres cucharas y dos o tres cucharillas de la misma forma.

El niño advertirá la diferencia y su atención recaerá sobre las grandes. Dale unos cuantos recipientes pequeños de plástico, que tengan la misma forma y tamaño, pero que sean de distinto color.

Se sentirá atraído por la diferencia de colores. Utiliza otros objetos para hacerle fijarse en la diferencia entre largo y corto, grueso y delgado y en otras características. Despertando así su atención, crearás las bases del enfrentamiento con lo abstracto.

La capacidad del niño de seis meses para abstraer y generalizar se halla íntimamente vinculada con el desarrollo del lenguaje.

sábado, 1 de octubre de 2011

Contacto social del Bebé


Ya he mencionado que el desarrollo del gorjeo y, más tarde, del murmullo depende de hasta qué punto se estimule a los niños a ser activos. Una condición mas consiste en la satisfacción de sus necesidades biológicas básicas.

Cuando el niño está descansado, bien alimentado y en buena salud, y cuando puede observar y oír algo interesante, moverá alegremente todo su cuerpo, incluidas las cuerdas vocales, y se complacerá en murmurar. El ejercicio siguiente estimulará el murmullo de tu hijo.


Estimulación del murmullo por simple contacto social. Cuando el niño esté de buen humor, alimentado y descansado, siéntate frente a él, inclínate en su dirección, sonríele, toca suavemente su barbilla, mejillas y cuello y murmúrale con voz cariñosa. La voz.femenina resulta más efectiva, al ser más aguda que la de los hombres.

Hacia finales del segundo mes, es probable que emita ya algún murmullo ocasional. Hacia el cuarto, serás capaz de arrancarle algún sonido de este tipo prácticamente cada vez que lo intentes. Alterna cinco segundos de murmullo con cinco segundos de silencio. En la mayoría de los casos, el niño murmurará a su vez durante el período de silencio. Recompénsale sonriéndole y acariciándole.

Para lograr que el niño murmure con frecuencia y aprenda por sí mismo a formar sílabas, lo mejor es que reacciones en la medida de lo posible frente a su murmullo espontáneo. Permite que te vea, sonríele e imita sus sonidos.

jueves, 29 de septiembre de 2011

Enseñar al bebé a distinguir objetos


Enseñar al niño a distinguir entre los materiales

Presionar juguetes de goma. Dale a tu hijo algunos juguetes de goma sonoros. Descubrirá pronto que, al apretarlos, emiten diversos sonidos. Los juguetes de goma blandos son preferibles a los duros, puesto que, al presionarlos, cambiarán también de forma.

Jugar con un tubo de goma. Si el niño toma un tubo de goma de unos sesenta centímetros de longitud, creará al moverlo diversas curvas, más o menos cerradas. Esos cambios de forma suscitarán su interés.

Jugar con una tela. Si le das al niño un pañal, una toalla o una pieza de ropa, empezará a arrugarlos, a extenderlos y a buscar otros medios de entretenerse con ellos.

Jugar con una bolsa de plástico. Mete varios objetos en una bolsa de plástico transparente (por ejemplo, avellanas y dados) y ciérrala. El niño apretará la bolsa, cogerá los diversos objetos que hay en su interior y los cambiará de posición. Los cambios en la forma de la bolsa, los movimientos de los objetos que hay en su interior y el ruido del plástico le excitarán y provocarán una intensa manipulación.

Arrugar y romper papel. Si le das al niño una hoja de papel limpio, pronto empezará a arrugarlo y a romperlo, lo que le mantendrá entretenido durante bastante tiempo.

Nota: El niño puede entregarse a algunos de estos juegos sin que estés presente, aunque, naturalmente, has de tener cuidado de no darle ningún objeto que pueda tragar, aspirar o estrangularse con él.

martes, 27 de septiembre de 2011

Lenguaje y Relaciones Sociales en Bebés


El desarrollo del lenguaje, de las relaciones sociales y de las emociones durante el segundo trimestre (y asimismo más tarde) están tan íntimamente entremezclados que no se pueden cultivar por separado.

En el sexto mes, tu hijo aprenderá probablemente a pronunciar todas las vocales, algunas consonantes e incluso algunas sílabas sencillas. También aprenderá a buscar con la vista algunos objetos cuando tú los nombres.

Empieza a crear una relación muy estrecha con las personas próximas a él y a diferenciar, a través de su comportamiento, entre ellas y el resto de la gente. Comenzará a establecer una relación activa con su entorno social.

Llorará en raras ocasiones y, cuando esté en contacto con sus allegados, reirá con frecuencia en voz alta.

domingo, 25 de septiembre de 2011

Desarrollo del Pensamiento en Bebés


Desarrollo del pensamiento

Objetivo: en el quinto y el sexto mes, el niño empieza a reaccionar a las relaciones entre causa y efecto, por lo que se puede empezar a prepararle lentamente para el pensamiento abstracto, es decir, para reaccionar de distinta manera a ciertas características de los objetos, dependiendo, por ejemplo, de si son grandes o pequeños, redondos o cuadrados.

Reaccionar a la relación entre el acto y su efecto. Durante el quinto y el sexto mes, te aconsejo que comiences a crear situaciones en que la actividad del niño dé lugar a un resultado inmediato. Utiliza para ello juguetes sonoros. Al principio, el niño apretará accidentalmente el juguete, y éste emitirá su sonido propio. Después de varios éxitos por casualidad, acabará por sentirse atraído por la conexión entre su propio acto y la reacción del objeto. Empezará a apretar el juguete con el propósito de hacerlo sonar.

Cuando el niño de cinco a seis meses juega con el trapecio que he descrito, observarás que empieza a experimentar, variando a propósito sus movimientos. Sin duda moverá el trapecio suavemente, luego con fuerza, y observará la diferencia en los resultados. Los juguetes que facilitan una variedad de actividades y dan lugar a resultados observables tienen un valor educativo superior al de aquellos que sólo permiten una actividad, que da siempre el mismo resultado.

Si cuelgas sobre el bebé la bolsa de plástico que describimos antes y en la que metiste diversos objetos, la manipulará durante mucho tiempo, porque puede agarrarla de varias maneras, apretarla y frotarla, hacer cambiar de lugar los objetos que encierra, etc. Esto conduce a una extraordinaria variedad de resultados, ya que la bolsa suena al agitarla y cambia de forma. En cambio, se cansará pronto de jugar con una pelota suspendida sobre él, puesto que son pocas las cosas que puede hacer con ella.

A los niños les gustan los juegos que les permiten descubrir por su cuenta las causas de los resultados que obtienen. Tales juegos son también los más apropiados para mantenerles activos y para poner en marcha los procesos fundamentales. Es importante para el niño que su acto cree un resultado inmediato, ya que así se hará obvia la relación entre causa y efecto. Sólo hacia el final del primer año será capaz de apreciar la relación entre acción y reacción cuando esta última llega un poco retrasada.

viernes, 23 de septiembre de 2011

Aprendizaje del bebé con objetos


Enseñar al niño a actuar con un objeto sobre otro objeto

Golpear un objeto pequeño contra otro mayor. Cuando el niño se ha acostumbrado ya a la mesa y a dar palmadas sobre ella, dale un cubo o cualquier otro juguete. Lo asirá y empezará a golpear la mesa con él. Cuanto mayor sea el ruido que haga, más fuertes serán sus golpes. A partir de ese momento, tendrás que enseñarle que le está permitido golpear la mesa de la cocina, pero no la del cuarto de estar.

Golpear un objeto en un lugar preciso. En el ejercicio anterior, el niño golpeaba toda la superficie de la mesa a su alcance, sin ningún propósito determinado. Enséñale a hacerlo en el punto que desea. Dale un cubo pequeño y coloca otro de mayor tamaño frente a él. Quítale el cubo pequeño y golpea con él el cubo grande. Pronto intentará imitarte.

Ayúdale sujetando su mano y obligándole a golpear un cubo con otro. Esto le enseñará a dirigir los golpes en una dirección determinada. Ve reemplazando el cubo pequeño por otros objetos y el grande por una caja. El niño golpeará los primeros contra la segunda.

Cambiar de lugar los objetos a través de la mesa. Enseña al niño a mover los objetos que hay sobre la mesa. Te imitará y hará deslizarse los objetos sobre ella. Toma su mano y haz que ejecute movimientos de deslizamiento.

Pasivo al principio, pronto comprenderá de qué se trata y los empujará él mismo. Prueba con un cucharón, por ejemplo. Este ejercicio sirve de preparación para otro, que consiste en enseñarle a mover un cubo con otro objeto, como el cucharón, es decir, a utilizar éste como un instrumento.

jueves, 22 de septiembre de 2011

Ejercicios de piernas para bebés


Suspensión con las piernas apoyadas en el estómago de un adulto. Siéntate, si te es posible en la cama, y sienta al niño en tu regazo, dándote frente y apoyando los pies en tu estómago.

Tiéndele los índices. Cuando los agarre, tira de sus manos suavemente. Presionará entonces las piernas contra tu estómago y se impulsará hacia arriba. Se mantendrá con las nalgas hacia fuera o se pondrá de pie, con el vientre hacia fuera. Oblígale a sentarse de nuevo y vuelve a tirar de él.

 Suspensión combinada. Cuando tu hijo sepa mantener su presa con la fuerza suficiente para sostenerse sin peligro, sujetándose a tus dedos cuando le atraes hacia ti desde la posición sentada a la posición de pie, intenta la suspensión combinada. Apoya el niño de espaldas en una almohada blanda y tiéndele dos dedos de una mano.

Cuando los agarre, sujétale por las piernas con la otra mano y álzale alrededor de diez centímetros por encima de la almohada, de manera que la cabeza y el tronco queden horizontales. Probablemente el niño será capaz de sostener con sus propias manos la mitad del peso de su cuerpo. El resto del peso recaerá en la mano con la que sujetas sus piernas.

Durante el quinto mes, emplea sólo este ejercicio como un test, comprobando por medio de él, una o dos veces por semana, los progresos que ha hecho. Si en el sexto mes consigue realizarlo sin esfuerzo, aplícalo con mayor frecuencia. Más adelante, complica el ejercicio sustituyendo tus dedos por una anilla o varilla. Para mayor seguridad, haz que su padre ponga una mano detrás de la cabeza del bebé.

Observación de lo que le rodea por encima de un obstáculo. Tu hijo utilizará más los brazos si esto le permite observar algo por encima de una barrera, por ejemplo el borde del cochecillo o del baño. No le tengas echado siempre boca arriba en el coche. Baja la capota, ponle boca abajo y coloca un colchoncillo debajo de él para que pueda sujetarse al borde y observar lo que pasa a su alrededor a medida que avanzáis.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

Sarampión en Bebés


En el caso del sarampión el enfoque del tema debería centrarse en la descripción de las medidas preventivas y de las características de las vacunas disponibles, ya que la finalidad de la acción sanitaria respecto de estas enfermedades para las que se cuenta con vacunas es erradicarlas, como sucedió con la viruela.

El sarampión no es, como todavía se cree, una enfermedad inofensiva e inevitable que es preferible "pasar" cuanto antes. Por el contrario, es una enfermedad peligrosa que puede dejar secuelas importantes e incluso causar la muerte. Como sucede con muchas otras enfermedades, la madre puede transferir al recién nacido sus anticuerpos específicos para el sarampión.

Estos duran alrededor de 9 meses, pero a partir de entonces el niño es susceptible de contraer la enfermedad. Por lo general esta enfermedad se produce en los primeros años de vida, pero es posible que no se contraiga hasta la adolescencia.

Hay descripciones de casos aislados y hasta verdaderas epidemias en edades más avanzadas, cuando los individuos han estado en contacto con el virus del sarampión (epidemias en islas o comunidades aisladas en las que no había penetrado la enfermedad). En estas circunstancias la evolución es siempre más azarosa. Se adquiere por contacto directo.

La enfermedad es producida por un virus. Antes de desarrollar todos los signos y síntomas el paciente ya contagia, lo que hace posible que la enfermedad se extienda considerablemente. Después de un período de incubación de aproximadamente 10 días aparecen fiebre, malestar general y el característico triple catarro (nasal, conjuntival y faríngeo), que van en aumento hasta que al 4- día aparece la erupción.

Esta comienza detrás de las orejas y en la línea de nacimiento del cabello y se extiende de cabeza a pies, y desde el tronco hacia los miembros. La piel presenta una coloración pardorojiza, con zonas de mayor concentración. La erupción comienza a desvanecerse al 3- o 4- día y la piel toma una coloración francamente pardusca. En los sitios más atacados se produce una descamación fina.

Es necesario aislar al niño durante todo el período eruptivo, para que no siga diseminando el virus. El sarampión deja de ser contagioso después del 5o día de comenzada la erupción; por lo tanto se considera que después de este período el niño puede regresar a la escuela.

lunes, 19 de septiembre de 2011

Niños que no pueden dormir solos


Muchos padres resuelven de diferentes maneras estas situaciones que se plantean cotidianamente y que exigen una gran cuota de paciencia y de dedicación, en un momento del día en que los adultos ya están cansados.

La salida más fácil es aceptar el requerimiento del niño de no dormir solo. Con ello, no es mucho lo que resuelven. Postergan para más adelante un proceso que inevitablemente deberá producirse.

El niño debe ir elaborando estos temores, para desarrollarse emocionalmente, y los padres requieren preservar su intimidad para una vida de pareja satisfactoria. Al niño habrá que transmitirle que no se lo abandona y, con firmeza, acompañarlo en sus vivencias, intentando que comprenda que existe una separación entre el mundo de los adultos y el suyo propio.

Como se comprenderá, en el manejo de todas las situaciones que plantean estas divisiones se ponen en juego factores de ambas partes: una pareja con conflictos sexuales podrá utilizar las dificultades lógicas del niño para ocultarse las propias.

Como decíamos al comienzo, la noche no es lo que muestran las apariencias. Juegan en ella emociones y conflictos que nada tienen que ver con la tranquilidad del reposo.

sábado, 17 de septiembre de 2011

Ejercicio de brazos para bebés


Objetivo: hacia el sexto mes, la fuerza de agarre del niño será sin duda lo bastante grande para sostenerle cuando se tira de él hasta ponerle de pie.

Un niño que se ejercita regularmente será capaz de mantenerlo durante por lo menos un segundo cuando se cuelga de una anilla y se apoya en las piernas. Su fuerza de empuje ha de ser la adecuada para permitirle arrastrarse con ayuda de los brazos por los menos unos sesenta centímetros y sostenerse sobre las rodillas (a cuatro patas).

Asirse a un trapecio mientras está echado boca arriba. Ya hemos descrito el trapecio al exponer los ejercicios para los niños de dos a tres meses. A los seis, se utilizará para ejercicios más complicados. En el segundo trimestre, el niño se agarrará a él con confianza creciente y empezará a impulsarse a sí mismo hacia arriba.

Al empujar, levantará las piernas vigorosamente. También empezará a volverse de costado y a ponerse boca abajo con ayuda del trapecio. Si colocas a tu hijo de manera que el trapecio quede longitudinal a él, lo sujetará con las manos y los pies y, a veces, se alzará en el aire. Si descansa sobre el vientre, lo asirá con una o las dos manos y, al mismo tiempo, inclinará hacia atrás la cabeza completamente.

Alzarse hasta quedar sentado y de pie. Tiende los índices a tu hijo de cuatro meses. Una vez que se aferré a ellos, tira de él hasta dejarle sentado. Hacia el quinto y sexto mes, la presa será lo bastante firme para servirte de una cuerda, un trozo de manguera de goma, una varilla o una anilla, en lugar de los dedos.

Observa siempre estas dos reglas: protege su cabeza, sin tocarla, para evitar el riesgo de una posible caída y no le dejes permanecer sentado. Acuéstale de nuevo cada vez. Cuando haya aprendido a mantener la presa sobre un objeto durante todo el trayecto hasta quedar sentado, puedes complicar el ejercicio acostándole sobre el costado derecho y tirando de él hasta que quede sentado sobre el lado derecho.

A continuación, colócale sobre el costado izquierdo y repite la operación. (Cuando esté echado de lado, las piernas del niño deben formar un ángulo recto con su cuerpo.) En el quinto mes, muchos niños no sólo contribuirán activamente a sentarse, sino que continuarán hasta ponerse de pie. El ejercicio dará mejor resultado si le descruzas las piernas y si tienes cuidado de que no resbalen hacia adelante.

El pequeño se apoyará entonces en ellas y se levantará por sí mismo. No tires de él hacia arriba mientras se cuelgue pasivamente con las manos. Estará maduro para este ejercicio cuando sea capaz de impulsarse por sí mismo hacia arriba con los brazos, con éstos formando un ángulo máximo de 45 grados."

jueves, 15 de septiembre de 2011

Escarlatina en Bebés


Es una de las enfermedades eruptivas de la infancia que más preocupa a los padres, ya que históricamente se la consideró como enfermedad grave. Este temor estaba justificado, pues en los hospitales pediátricos existían salas dedicadas exclusivamente al tratamiento de esta afección y sus complicaciones, pero el uso de medicamentos específicos y los métodos de diagnóstico temprano para el germen causal han cambiado notablemente la evolución de la enfermedad y su pronóstico.

El agente productor de esta enfermedad es una bacteria

llamada estreptococo hemolítico del grupo A, que causa diversas afecciones en la niñez: amigdalitis, o faringitis, escarlatina, o infecciones de la piel. El tipo de infección que produce este germen depende de la vía de entrada y de la edad y el estado inmunológico del huésped. La incidencia es generalmente menor en los lactantes, comienza a aumentar entre los 6 y los 12 años y llega a la máxima expresión antes de la adolescencia. Las infecciones son más frecuentes en invierno y primavera.

La enfermedad se transmite principalmente por contacto directo con un enfermo o con portadores de gérmenes. La escarlatina comienza bruscamente, con fiebre, vómitos, faringitis o amigdalitis y, en algunas oportunidades, dolor abdominal intenso que puede sugerir un cuadro quirúrgico.

La erupción aparece generalmente a las 12 horas de comenzar la enfermedad. Son lesiones rojas, puntiformes, del tamaño de la cabeza de un alfiler, que dan a la piel una textura áspera, similar a la del papel de lija. Se extiende rápidamente por todo el cuerpo y tiene el aspecto de una "quemadura de sol con piel de gallina". Se inicia en la cara, se extiende al tronco y luego a las extremidades. Las amígdalas están aumentadas de tamaño y enrojecidas. El paladar y la úvula presentan el mismo aspecto.

La lengua presenta una coloración blanca en los primeros días y luego se torna roja y brillante, salpicada de papilas prominentes. Por su aspecto se la denomina "lengua de frutilla".

Al final de la primera semana desaparecen todos los síntomas y comienza la descamación de la piel, uno de los rasgos característicos de la escarlatina.

Pueden aparecer en el transcurso de la primera semana, por acción directa de los estreptococos. Las más frecuentes son la otitis media y la sinusitis.

Las posibles complicaciones tardías (después de 1 a 3 semanas) son la fiebre reumática y la glomerulonefritis aguda, que son graves pero afortunadamente poco frecuentes y en su incidencia disminuye con la instauración del tratamiento antibiótico adecuado y temprano.

Este apunta a varios objetivos fundamentales: dominarlos efectos de la enfermedad, acortar su duración e impedir las complicaciones y la transmisión. Es importante instituir tratamiento preventivo en los niños que están en contacto con un enfermo. Como sucede con otras enfermedades eruptivas de la infancia, en el caso de la escarlatina no es aconsejable el cierre de grados ni de escuelas, sino un buen seguimiento de los niños que han estado en contacto con el germen.

martes, 13 de septiembre de 2011

Bebés con problemas para dormir


No podemos decir que el insomnio se presenta en el niño de la misma forma que en el adulto; pero en ambos, la llegada de la noche puede promover ansiedad y temor. Es el momento de quedarse solo, enfrentado con algo desconocido; de alguna manera se emprende un viaje a otra dimensión.

Dé allí que exista, alrededor de la noche, toda una mitología: brujas, fantasmas y vampiros. En la temprana infancia esto se ve incrementado cuando los padres se separan del niño y éste debe aceptar que ambos se quedan juntos y lo excluyen.

Se suman entonces dos emociones muy intensas: el miedo a la separación y el temor a la exclusión.

Es por ello que entre los dos a tres años comienzan a manifestarse las dificultades para conciliar el sueño. El niño no quiere irse a dormir. Se resiste, llora o expresa su resistencia en los rituales nocturnos, exigiendo que la madre se quede junto a él, que lo acune, que no apague la luz, que no cierre la puerta. Más adelante podrá acompañarse con un muñeco querido que actúa como tranquilizador.

Otras conductas pueden tener también el mismo valor; por ejemplo, la succión del pulgar. Los cuentos también cumplen esa función: acompañan al niño, poblando de palabras, personajes, historias, ese mundo que se le presenta como vacío de la compañía materna, de la luz y del movimiento del día.

domingo, 11 de septiembre de 2011

No existe la madre ideal


En la práctica, a medida que pasan las semanas después del nacimiento, debes pues ocuparte lo más posible de tu hijo durante sus «ratos de ocio», es decir sus períodos de vigilia, si bien respetando sus pequeñas siestas de después de mamar. Así, habiendo tenido una jornada bien repleta, dormirá toda la noche sin molestar a sus padres.

El cuarto paso consiste en consagrar al bebé los dos meses que siguen al alumbramiento, como mínimo. No hay duda de que resulta insuficiente, pero en nuestras sociedades modernas en que la mujer suele trabajar, es generalmente imposible que ésta pueda obtener más de dos meses de descanso posnatal.

Al menos, esos dos meses deben ser consagrados de modo prioritario al bebé. Tanto el marido como los otros hijos deben comprender esa necesidad, y no constituir una carga suplementaria para la joven madre, sino una ayuda.

El quinto paso, y el más difícil, consiste en tratar de seguir prodigando el máximo de ternura y de atenciones posibles al lactante tras esos dos meses.

Mas es evidente que las condiciones varían según cada caso particular, y que la mujer que sale a trabajar a las seis de la mañana para no volver hasta las ocho de la tarde, teniendo que ocuparse además de la casa, podrá consagrar muy poco tiempo a su hijo, confiado por lo general a una guardería o a una nodriza.

En definitiva, el ideal no existe en nuestro «evolucionado» mundo actual. A cada madre le corresponde comprender la importancia del contacto físico y sentimental que debe tener con su hijo, así como organizar su vida, en el límite de sus obligaciones profesionales, para consagrarle el mayor tiempo posible y lo mejor de sí misma.

No obstante, no debe olvidar nunca que un bebé necesita todavía más sus caricias que su leche, más su amor que el hecho de cambiarle los pañales.

sábado, 10 de septiembre de 2011

El Desarrollo de los Hijos


Las nociones, ya clásicas, sobre el desarrollo intelectual del niño se desprenden de los trabajos de Jean Piaget, el célebre psicólogo suizo.

Para él, los niños construyen su universo mental pasando por etapas claramente determinadas y que siguen un orden invariable: «... la adquisición de ciertas nociones por parte del niño es imposible en tanto no se ha alcanzado la etapa correspondiente».

Este modo de ver las cosas es compartido por el profesor francés Francois Lhermite, el cual escribe: «... el desarrollo cognoscitivo sigue etapas que en la actualidad están bien definidas, ninguna de las cuales podría ser omitida en la progresión que conduce al pensamiento hipóte tico-deductivo según la concepción de Piaget».

Sin embargo, los más recientes trabajos parecen contradecir ese modo un tanto rígido de enfocar el proceso de «maduración intelectual». En especial, las numerosas investigaciones efectuadas por embriólogos y fisiólogos a partir de embriones animales y de animales recién nacidos.

Para todos esos autores: «... la función puede desempeñar un papel en la maduración normal de los órganos y del cerebro, y por consiguiente en el desarrollo del comportamiento [...].

El momento de aparición de una determinada conducta depende de la función o de la experiencia. En ausencia de toda experiencia, el comportamiento en cuestión aparecerá a pesar de todo, aunque mucho más tarde [...].

Esta idea de «facilitamiento» implica asimismo que, si bien ciertas aptitudes comportamentales propias de una especie pueden desarrollarse en ausencia de experiencia anterior, nunca podrán alcanzar su más alto nivel de funcionamiento o de diferenciación [...].

La experiencia precoz produce —con respecto a un estado ulterior normal— fenómenos que jamás se manifestarían si no hubiera existido dicha experiencia precoz [...]. Los ejemplos de inducción (influencia determinante de una experiencia precoz) subrayan la importancia de la plasticidad com-portamental a lo largo del desarrollo...».

jueves, 8 de septiembre de 2011

Aprendizaje del bebé


Veamos lo que escribe el profesor P. Monnod, de la universidad de Ginebra, y alumno de Piaget: «La organización del niño desde el nacimiento es mucho más rica y mucho más compleja de lo que antaño se creía. Hechos evidenciados recientemente han demostrado que el bebé posee un único compuesto de objetos estables desde las primeras semanas de vida, mientras que las antiguas experiencias atribuían tales posibilidades al segundo año de vida.

Es necesario volver a plantearse la personalidad del bebé [...]. El segundo descubrimiento consiste en que el bebé no realiza progresos acumulativos; cada nueva adquisición no viene a añadirse a las precedentes, el bebé no lleva a cabo progresos que van de lo malo a lo mejor. Y es así pese a que nos cueste admitir la discontinuidad del desarrollo. Varias veces seguidas, el bebé reorganiza de modo diferente sus intercambios con el mundo que le rodea...».

Desde el comienzo de su existencia, el ser humano elabora teorías que periódicamente deberá destruir y abandonar a fin de construir otras más acordes y que se beneficien de sus adquisiciones más recientes. Es así, «de revolución en revolución», como irá progresando.

Dicha plasticidad comportamental, que parece oponerse a la rigidez del sistema de Piaget. es igualmente puesta de relieve por los trabajos de Jéróme Bruner, investigador de Harvard, quien ha demostrado las actividades ultraprecoces del cerebro de los lactantes: «... existe realmente un sistema de información y de reflexión en el cerebro de todo lactante [...].

Los niños responden, desde las primeras semanas y desde la primera experiencia, a los cambios ocasionados por sus propios actos [...]. Al revés de lo que ocurre en el condicionamiento, cuando se trata de su propia iniciativa el bebé aprende con extraordinaria rapidez [...]. La intención que precede a la acción y las hipótesis que fabrica el cerebro son fundamentales en la organización del conocimiento. La intención del niño actúa como un filtro selectivo.

Es ella la que le permite eliminar las informaciones parásitas. Cada gesto, pensado antes de ser realizado, se convierte en un modelo que en adelante podrá ser utilizado, no sólo para llegar a una habilidad de manipulación de la que solamente el hombre es capaz, sino también para hacer progresar el pensamiento y el lenguaje [...]. La noción de un orden interior prefijado, tal como es definida por Piaget, no abarca la inmensidad del campo de las posibilidades humanas».

Las teorías de Piaget son refutadas por los trabajos del equipo de Tom Boweer y los del doctor G. Trevarthen en Edimburgo, que han probado que los recién nacidos y los lactantes poseen una mayor y mejor coordinación de lo que pensaba Piaget, y además desde una etapa mucho más temprana. En la universidad de Oxford, el equipo del doctor P. Bryant ha demostrado asimismo que los niños pequeños son capaces de realizar deducciones lógicas mucho antes de lo que pensaba Piaget.

martes, 6 de septiembre de 2011

La Maternidad según Arthur Janov


La Maternidad y la relación ideal entre madre e hijo forman parte desde hace milenios de las más antiguas tradiciones de la humanidad, en todas las latitudes.

Veamos cómo describe Arnaud Desjardins la relación entre madre e hijo tal como existía en la India antes de que la «civilización» occidental trastocara todas las tradiciones:

«... Todo era concebido para evitar al bebé, y después al niño, los traumas, las frustraciones, las dificultades de adaptación que son la fuente de las neurosis futuras. La relación de un niño con su madre, liberada ésta de cualquier otra tarea o responsabilidad que no sea ocuparse de él, la posterior entrada en juego del padre, el alejamiento progresivo de ambos, todo estaba previsto para permitir al niño adaptarse sin tropiezos al mundo exterior.

»La influencia de la madre sobre el niño —y en consecuencia sobre el futuro adulto— comienza desde el embarazo. Cualquier trastorno que afecte a la mujer encinta afecta también, y para siempre, al ser que lleva en su interior. En la tradición hindú, a la futura madre se la protege de toda contrariedad, y se la considera sagrada. En occidente, en la actualidad, las embarazadas se dispersan en todo tipo de actividades y preocupaciones.

»... Después, hacia la edad de siete años, al niño se le pone interno con un preceptor o gurú; no lo educan pues sus padres. El gurú se halla en condiciones de adoptar con los niños una actitud objetiva, exenta de las reacciones emocionales que los padres tienen frente a sus hijos. Así, los niños se hallan libres de la proyección de las neurosis paternas sobre ellos, lo que constituye la más grave enfermedad del mundo actual...»

Es interesante constatar que en esta última frase volvemos a hallar una de las afirmaciones formuladas por un gran psicoterapeuta occidental: Arthur Janov. La investigación occidental de vanguardia se une así a la tradición oriental.

domingo, 4 de septiembre de 2011

El Amor de una Madre


A menudo se habla del sexto sentido de que dispone la madre frente a su hijo. En efecto, aunque se halle ocupada en algún trabajo casero, la madre percibe cualquier cambio en la respiración de su bebé, un temor, un deseo, antes incluso de que se materialicen. Por la noche, la despertará el menor gemido, la menor modificación física, una pausa respiratoria, mientras que su sueño no se verá interrumpido por un ruido más violento procedente de la calle.

Ese sexto sentido existe, es cierto, mas su agudeza depende de la cantidad de amor que la madre envía a su hijo, un poco como si ese sexto sentido tuviera al amor como «onda portadora». En realidad, la intensidad y profundidad de su amor condiciona la calidad de la «concentración» de la madre en relación con su hijo.

Cuanto más se concentra la atención y el objeto de la vida sobre un único tema, más se conectan, de modo inconsciente y automático, todos los sentidos sobre el objeto de esa solicitud. Esa prioridad sensitiva permite, por supuesto, una mejor recepción de los mensajes enviados por el niño, del mismo modo que enfocar todos los radares del territorio nacional sobre un mismo rincón del espacio permite una mejor vigilancia, detectándose débiles señales que en otras condiciones hubieran pasado inadvertidas. Ese sexto sentido no representa de hecho sino una mejor utilización de los otros cinco, habituales y anatómicos, utilizados en la vida corriente a una décima parte de su capacidad.

Ese ajuste de todos los sentidos de la madre sobre su hijo no quiere decir, por otra parte, obnubilación. Esa línea directa, establecida insconscientemente entre la madre y su hijo, sólo traduce una atención automática despierta, sin la acción de la voluntad, que llevaría a la obsesión. El motor de dicha atención automática es tan sólo el amor y el interés sentimental.

Es similar al interés que hace que el automovilista al que le gusta conducir y que aprecia su coche perciba de inmediato el menor ruido anormal de su motor, la menor debilidad del embrague, etc., sin que eso signifique que piensa en cada momento en su embrague o en el cigüeñal de su motor. Lo que ocurre es que un circuito privilegiado de comunicación se ha establecido entre el objeto —el coche— y el ser humano, y la «onda portadora» del mensaje es el interés benévolo y sentimental que el automovilista experimenta por su coche.

Comprendiendo dicho mecanismo, es fácil imaginar la potencia del circuito privilegiado que puede establecerse entre dos seres humanos (por ejemplo, entre dos seres que se aman profundamente) y, con mayor motivo, cuando se trata de una madre y su hijo, la potencia de la forma más incondicional de amor, el amor materno.

viernes, 2 de septiembre de 2011

Maternidad Moderna


El ideal del maternaje es incompatible con los imperativos de la vida cotidiana en nuestras sociedades modernas. Con todo, es indudable que las cosas van a mejorar en el futuro, y afortunadamente asistimos ya a una vuelta a la lactancia natural.
De momento, y teniendo en cuenta las obligaciones de la vida moderna, es preciso que la madre trate de aportar el máximo al niño en el mínimo de tiempo de que se dispone.

Dar el pecho me parece el primer paso.

El segundo, consagrar bastante tiempo durante el día al bebé a fin de prodigarle el amor y la ternura que tanto necesita.

El tercer paso consiste en enseñar de inmediato al bebé a respetar el reposo nocturno. La última mamada se le puede dar a medianoche, y la primera a las seis de la mañana. Quizás el niño llore las primeras noches entre esas dos mamadas, pero no tardará en comprender que la noche está hecha para dormir.

Un bebé del que uno se ocupa a lo largo del día dormirá de noche como todo el mundo, para satisfacción general. Si es preciso, una débil luz cerca de su cuna podrá calmar sus angustias nocturnas. Ese respeto de la tregua nocturna es el único «adiestramiento» que se le debe imponer al bebé, pues el no respetarla resulta incompatible con la vida en sociedad.

Como ya he dicho, me opongo por completo a la opinión de ciertos pediatras que aconsejan a las jóvenes madres que den de mamar al niño cuando lo pida, aunque sea a altas horas de la noche. No es el pediatra sino el tocólogo el que tiene que visitar a continuación a esa pobre madre, totalmente agotada al cabo de pocas semanas de ese régimen de insomnio que nadie podría resistir. La salud de la madre no debe ser sacrificada a los caprichos del recién nacido. Por supuesto, no se trata de hacer sufrir al bebé, sino tan sólo de habituarlo al ritmo día-noche que gobierna la vida de los adultos.

Evidentemente, un bebé necesita dormir mucho más que un adulto. En general, en el curso de ¡a primera semana que sigue al nacimiento, duerme de 18 a 20 horas al día; es decir que su madre le verá sobre todo dormido, pues sólo se despertará cuando se sienta atenazado por el hambre y reclame la mamada.

A partir de la primera semana, el tiempo de sueño pasa a 15-16 horas al día, para disminuir de modo progresivo durante los primeros meses hasta las 12 o 14 horas. Mas es sobre todo el ritmo de sueño y de vigilia lo que se altera; los períodos de vigilia se van alargando, jalonados por largas siestas, generalmente después de las mamadas.

Madre no esclava


Por otra parte, ocuparse con frecuencia del bebé durante el día le ayudará a adquirir el ritmo de vida de los adultos, es decir a permanecer despierto durante el día y dormir durante la noche.

El niño al que se deja solo en la cuna tiene en efecto la molesta costumbre de adoptar un ritmo de vida al revés: duerme durante el día y grita durante la noche para exigir que se ocupen de él, lo que no tarda en repercutir gravemente sobre el sueño —y en consecuencia sobre la salud— de los padres, quienes están obligados a seguir el ritmo de vida de los adultos.

Es por eso por lo que estoy en contra de la actitud de ciertos pediatras que reducen a las jóvenes madres a ser esclavas de su bebé. Éste duerme tranquilamente todo el día y perturba cada noche el sueño de su madre, reclamando el pecho a cualquier hora. La pobre madre sigue los consejos del pediatra, hallándose así al cabo de pocas semanas en un intenso estado de fatiga a causa del insomnio crónico.

A fin de respetar los imperativos de la vida moderna, y el sueño de los padres, es preciso que el niño duerma por la noche, permaneciendo en consecuencia bastante rato despierto durante el día. El único medio de lograrlo es ocupándose de él con frecuencia a lo largo del día.

miércoles, 31 de agosto de 2011

Bruno Bettelheim


El célebre pediatra Bruno Bettelheim defiende ideas extraordinariamente similares a las expuestas en este blog, a saber: al maternaje debe suceder una educación aportada a ser posible por una persona ajena a la familia; la angustia y la neurosis de los padres afecta y se transmite al hijo; bajo la influencia de la opresión de los padres, el niño pronto rechaza su propia personalidad, para tratar de adoptar la imagen de lo que sus padres esperan de él; cualquier descontento de los padres culpabiliza de modo trágico al hijo.

Veamos lo que dice Bettelheim:

«Paradójicamente, a menudo les resulta más difícil a los padres enfrentarse a los problemas de sus hijos que a los de personas extrañas, porque los padres parten con frecuencia de una posición falsa: "Es mi hijo, yo sé lo que es bueno para él". Ahora bien, los hijos han aprendido a disimular ante sus padres lo que sienten, porque las reacciones de los padres son por supuesto las que les crean mayor ansiedad [...].

»Los niños, todos los niños, detestan que desplacemos sobre ellos nuestros propios problemas. Cuando se les dice: "Haz eso, es por tu bien" y sienten que en realidad uno no se lo pide por el bien de ellos sino por el suyo propio, experimentan un gran resentimiento [...]. Todos los niños sufren al ser utilizados para fines ajenos [...].

»Es preciso destacar que no hay nada más difícil de soportar para un niño que la inseguridad de sus padres. Siempre piensa que si sus padres se preocupan es por su causa, y ello engendra un intenso sentimiento de culpa que a veces puede ser destructor.

»Lo que cuenta en la relación entre padres e hijos no es lo que se es, ni siquiera lo que se hace, sino lo que los niños ven, es decir la imagen que se hacen de sus padres [...]. Pienso que debemos aceptar al niño desde su aparición, desde el primer momento de su nacimiento, como una potencia propia. Y debemos respetarle en tanto que tal.»

lunes, 29 de agosto de 2011

La Maternidad en la sociedad moderna


Freud fue el primero en demostrar que la infancia, e incluso la primera infancia, tenía una importancia fundamental en el desarrollo del ser humano adulto.

Los trabajos de los psicólogos modernos, y en especial de los norteamericanos, van más lejos aún: las neurosis, los «problemas» del adulto dependerían sobre todo de los «traumas psíquicos» experimentados por el niño en los primeros meses y los primeros años de vida. Los psicoteóricos y los psicoterapeutas norteamericanos son en la actualidad, y con mucho, los más avanzados en lo que concierne directamente a la personalidad del adulto de nuestras sociedades modernas, adulto que en general no se siente muy feliz (y es lo menos que se puede decir).

Las nuevas concepciones psicoterapéuticas, que en Estados Unidos rebasan ampliamente el entusiasmo popular que en una determinada época se concedió al psicoanálisis clásico, freudiano o post-freudiano, hacen hincapié en los traumas psíquicos de la infancia, a pesar de que dichas teorías difieran en sus principios y métodos.

Una de las psicoterapias que parece más eficaz y prometedora, la terapia primal de Janov, lo centra todo en las relaciones entre el niño y sus padres. Para Janov, los padres modernos no sólo no «maternan» al niño pequeño, no sólo impiden que se desarrolle su verdadera personalidad, sino que le obligan a ser lo que los padres quieren que sea, en detrimento de lo que el niño es realmente.
El niño es impulsado a rechazar su propia personalidad, y a adoptar, para agradar a sus padres, la imagen del niño bueno que éstos desean que sea.

El niño muy pequeño espera de sus padres que le acepten tal como es y se dediquen a él por entero, estando disponibles en todo momento para aportarle amor y confianza.

Pero prefiero citar al propio Janov: «El niño nace en el contexto de las necesidades de sus padres y empieza a luchar para satisfacerlas desde su nacimiento [...]. Lo hará todo salvo ser él mismo. Esta multitud de relaciones que se establecen entre los padres y el niño, y en las que se dejan de lado sus necesidades naturales, sus necesidades primigenias, significa que el niño sufre.

Significa que no puede ser lo que es y al mismo tiempo ser amado [...]. Si hubiera amor en sus padres, el niño sería lo que es, pues amar significa dejar al otro ser lo que es [...]. En los primeros meses y los primeros años de su vida, el niño se cierra sobre sí mismo, porque en general no tiene otra elección. Para sobrevivir, debe condenar a muerte una parte de sí mismo. Es preciso que juegue el juego de sus padres, no el suyo [...]. Hará todo lo posible para agradar a sus padres pero, por desgracia, lo que se espera de él resulta vago e indefinido, porque sus padres tampoco saben qué hacer para ser libres y felices».

En los humanos, el adiestramiento ha reemplazado al maternaje que los padres modernos no pueden ni quieren dar.
De esta incursión en el dominio del pensamiento psicológico moderno retengamos una única noción: el maternaje es una necesidad vital de todo bebé en la que se le defrauda en nuestras sociedades modernas. La frustración que supone nunca será olvidada, pese a que sea reprimida en el subconsciente, y estará en la base de la mayoría de los problemas del adulto.

Aun cuando esa influencia de los primeros meses y los primeros años de vida sobre el comportamiento del adulto pueda parecer inverosímil a muchos de nosotros, ha quedado demostrada en nuestros días por casi un siglo de investigaciones psicológicas y psicoanalíticas.
El que la mayoría de nuestros contemporáneos lo ignoren todo sobre la psicología y el desarrollo psicológico de la personalidad humana no les autoriza a negarlo todo con ironía.

Convendría quizá no criticar tanto a priori, documentarse antes, mantenerse al día en lo que concierne a las grandes corrientes de pensamiento que florecen y se multiplican allende nuestras fronteras, y después juzgar con pleno conocimiento de causa.

sábado, 27 de agosto de 2011

Lactancia Natural


La lactancia natural

Veamos lo que piensa el profesor Henri Lestraclet, jefe de servicio en el hospital Hérold de París, considerado como uno de los mejores especialistas del mundo en nutrición del recién nacido:

«Cuando consideramos lo que ocurre en los mamíferos, así como en las tribus humanas primitivas, constatamos en primer lugar que el plazo entre el parto y la lactancia es siempre muy breve (unas decenas de minutos), y a continuación que la madre proporciona al recién nacido el alimento que ha elaborado antes que la leche: el calostro.

El dar el pecho de inmediato, además de ser psicológica y emocionalmente satisfactorio para la madre, presenta la gran ventaja de facilitar la subida de la leche. Las mujeres y los médicos de antaño sabían por instinto lo que desmuestran las experiencias más recientes: la rapidez con que la madre da el pecho, así como la frecuencia y duración de la mamada, influyen directamente sobre la cantidad de leche secretada.»

Me limitaré a añadir que la succión del pezón que realiza el recién nacido provoca la secreción de una hormona (la oxitocina) cuyo papel es aumentar el tono muscular del útero, con el fin de prevenir una posible hemorragia. Por el mismo mecanismo, ofrecer el pecho al recién nacido en los minutos que siguen al nacimiento favorece al parecer el desprendimiento de la placenta, es decir una expulsión fácil y sin problemas.

Y he aquí la opinión del doctor Spock, el más célebre pediatra del mundo:
«La sustitución de la mamada por el biberón priva al niño de un intenso contacto, y frustra al mismo tiempo a la madre en la necesaria unión sensual con su hijo.»

jueves, 25 de agosto de 2011

Alimentación en Bebés - Palabras de expertos


Si bien el alimento es necesario para el niño a fin de lograr el crecimiento físico, el amor no le es menos indispensable para desarrollarse emocionalmente. Dar al niño el máximo de amor posible ha sido y sigue siendo uno de los fundamentos de toda sociedad tradicional. Y esa ternura no se contradice con una severidad que sin embargo falta en la educación contemporánea [...] La insuficiencia de los padres en la sociedad contemporánea produce frutos que se manifiestan en el desconcierto de los jóvenes, ya sean obreros o estudiantes. Cosechamos lo que hemos sembrado. A causa de que el principio de su existencia ha sido fallido, millones de hombres y mujeres sienten una insatisfacción tan fundamental que no pueden reconciliarse con el mundo en que deben vivir.
ARNAUD DESJARDINS.

Un niño al que se ama es un niño cuyas necesidades maternales están satisfechas. El niño que no es amado sufre porque se halla frustrado. El amor elimina su sufrimiento. El niño amado no siente la necesidad de ser alabado, pues no ha sido denigrado antes. Es apreciado por lo que es, y no por lo que puede hacer para satisfacer las necesidades de sus padres [...]. La necesidad de ser tenido en brazos y acariciado forma parte de la necesidad de ser estimulado. La piel es nuestro órgano sensorial más extenso, y reclama al menos tantas estimulaciones como los demás órganos de los sentidos.
ARTHUR JANOV.

Los bebés necesitan leche, cierto, pero más aún ser amados y recibir caricias [...]. En los bebés, la piel supera a todo lo demás. Es el primer sentido [...] Es preciso cuidar esa piel, nutrirla. Con amor, no con cremas. Ser llevados en brazos, acunados, acariciados, frotados... constituyen alimentos para los bebés, tan indispensables —si no más— como las vitaminas, las sales minerales y las proteínas.
En los países que han conservado el sentido profundo de las cosas, las mujeres todavía saben todo eso...
FREDERIK LEBOYER.

martes, 23 de agosto de 2011

Maternidad y Psicología Moderna


Durante los primeros meses y los primeros años, el afecto más íntimo del niño se centra en su madre. Ese cariño se inicia antes del nacimiento, cuando madre e hijo, pese a ser dos, constituyen un solo ser.

Sin duda, el nacimiento modifica la situación en ciertos aspectos, si bien menos de lo que hacen suponer las apariencias. A pesar de que ahora viva fuera de la matriz, el niño sigue siendo completamente dependiente de la madre.

Tan sólo al cabo de los días conquista su autonomía; aprende a andar, a hablar, a explorar el mundo por sí mismo...

ERICH FROMM, El arte de amar.

lunes, 22 de agosto de 2011

Aspectos generales de la Maternidad


Mas lo que me parece esencial no perder de vista es que el maternaje no sólo representa un contacto cutáneo de efectos fisiológicos más o menos claros según las especies, sino asimismo un contacto afectivo, con un efecto psicológico extremadamente importante.

Considero que, a medida que nos elevamos en la jerarquía de los mamíferos, el aspecto afectivo del maternaje se hace incluso mucho más esencial, en tanto que el lado puramente fisiológico, orgánico, se vuelve menos marcado.

Pienso que en el hombre, que ha llegado a la cima de la evolución animal, si bien el maternaje ha perdido su importancia fisiológica, adquiere en compensación una importancia afectica y psicológica capital, tanto para la madre como para el hijo.

Todo lo cual viene a confirmarnos en lo que ya apuntábamos al estudiar los datos de la psicología y la psicoterapia: la importancia fundamental del contacto con la madre en la primera infancia y de la relación con los padres en el resto de la misma.

Los datos de la psicología moderna confirman perfectamente la importancia del maternaje para el desarrollo afectivo y psicológico del futuro niño y el futuro adulto.

Anteriormente ya me he referido a los trabajos e investigaciones de los grandes psicólogos norteamericanos contemporáneos, en base a las grandes psicoterapias modernas: terapia Gestalt, bioenergía, terapia primal, análisis transaccional, investigaciones y análisis bajo los efectos del LSD, psicodramas, etcétera.

Todas estas aproximaciones psicológicas a las profundidades del subconsciente y del pasado memorizado conceden una importancia fundamental a las primeras semanas, meses y años de la vida del ser humano, a pesar de que luego difieran en sus conclusiones en el plano psicoterapéutico.

Para Arthur Janov, cuya terapia primal constituye una de las técnicas más eficaces, si no la más brutal, el porvenir psicológico del adulto se decide en los primeros meses y años de la vida del niño. Todos los conflictos del adulto encuentran su explicación, su fuente, en los conflictos cruelmente sentidos y reprimidos de inmediato de la primera infancia.

domingo, 21 de agosto de 2011

Relación Madre e Hijo



Al igual que en los-demás mamíferos, en la especie humana el maternaje comporta siempre una gran parte de contacto físico (caricias, besos, presencia física de la madre, etc.), pero asimismo una parte —más importante que para los mamíferos inferiores— de ternura, de afecto, de «presencia» sentimental.

El niño necesita sentir que su madre sigue allí, dispuesta a tranquilizarle o a calmar sus necesidades vitales fundamentales.

Por desgracia, es inútil engañarse, y es preciso hacerse a la idea de que esa necesidad fundamental ya no se corresponde con las posibilidades de la madre en nuestras sociedades modernas.

Esta ya no tiene materialmente la posibilidad de consagrarse por entero a su hijo durante meses como éste desearía. El ritmo y los imperativos de la vida moderna, así como el hecho de que a menudo la madre trabaja, crean un abismo infranqueable entre los requerimientos del hijo y las posibilidades de la madre.

Es preciso pues tratar de conciliar lo inconciliable, es decir las necesidades del niño y las posibilidades de la madre.

Dar el pecho es una condición importante en la relación entre madre e hijo

De todo lo que he expuesto se desprende la importancia de que la madre dé el pecho a su hijo. Se trata del medio más natural y eficaz de estrechar los lazos físicos entre la madre y su bebé.

Además, la leche materna constituye el mejor alimento posible para el recién nacido.
Como explicaré en el capítulo siguiente, debe darse el pecho durante dos meses como mínimo, lo que por otra parte corresponde en diversos países al período legal de reposo posnatal.

Más articulos informativos sobre maternidad e hijos:

amor madre hijo
frase de madre a hijo
poemas de hijo a madre
los hijos
maternidad

viernes, 19 de agosto de 2011

ICSI - Inseminación Intracitoplasmática


INSEMINACION INTRACITOPLASMATICA (ICSI)

Es el último y más importante avance en el campo de la fertilización asistida y consiste en la inyección de un solo espermatozoide directamente dentro del citoplasma del óvulo. Al igual que para el SUZI, se utiliza una pipeta de sujeción y una aguja de inyección, pero esta última debe tener un diámetro de no más de seis micrones.

La aguja se carga con un solo espermatozoide, seleccionado entre los de mejor morfología aparente, y se introduce atravesando la zona pelúcida y el citoplasma del óvulo, donde se inyecta con el menor volumen posible de líquido.

La principal diferencia que existe entre el SUZI y el ICSI radica en que si bien en ambos casos es suficiente contar con un número muy bajo de espermatozoides, éstos deben ser funcionales para llevar a cabo la primera de las mencionadas técnicas mientras que para el segundo de los casos se pueden utilizar espermatozoides carentes de acrosoma y de movilidad, o sea con ciertas alteraciones en su función.

miércoles, 17 de agosto de 2011

MARILYN FERGUSON - Maternaje y Tradición Ancestral


Maternaje y tradición ancestral

El hombre,- con su largo período de edad temprana y su preadoles-cencia prolongada, con su excepcional plasticidad, tiene todavía muchas más probabilidades que las ratas y los gatos de dejarse influir por las estimulaciones en su primera infancia.

En Uganda, el niño medio, educado según las costumbres de dicho país, camina a la edad de diez meses, si no es a los siete. El niño ugandés es vigilado de muy cerca por su madre, quien lo lleva con ella a todas partes, acechando con cuidado sus menores deseos. En cuanto intenta sentarse o levantarse, ella le ayuda.

En cuanto intenta hablar, le anima a que lo haga. Entre el quinto y el séptimo mes, el bebé ugandés alcanza el estadio de los bebés europeos dos meses mayores por lo que respecta a la aptitud de hablar, de adaptarse, de comunicarse con el entorno. No obstante, los niños ugan-deses criados por padres que han adoptado las costumbres europeas no muestran ninguna precocidad más allá del primer mes.

MARILYN FERGUSON, La Révolution du cerveau.

lunes, 15 de agosto de 2011

La Maternidad Humana


Hemos visto cómo todas las crías de los mamíferos se benefician en cuanto nacen —y durante su edad temprana— de los atentos y constantes cuidados de su madre.

Esos diversos cuidados, designados bajo el vocablo general de «maternaje», se caracterizan por una unión permanente entre madre e hijo, y por la importancia extrema, vital, de los contactos cutáneos entre ambos. Cualquiera que sea la naturaleza y la variedad de esos contactos, su importancia ha sido subrayada por todos los investigadores.

De todos los mamíferos, incluso los más evolucionados, el bebé humano es el único que no recibe esas atenciones. ¿Por qué?
Montagu enuncia una hipótesis explicativa: los contactos cutáneos, y en especial la estimulación sensorial que representan, no serían indispensables en el hombre porque el feto recibiría dicha estimulación durante la fase de dilatación por medio de las contracciones uterinas.

Es un hecho que la fase de dilatación es en la mujer la de más larga duración de todos los mamíferos.

Sin embargo, los niños nacidos por medio de cesáreas efectuadas antes de que comience la dilatación no se benefician de la acción de las contracciones uterinas. Montagu intenta exponer que la mortalidad es más elevada entre los niños nacidos con cesárea, opinión falsa por completo y que por consiguiente yo rechazo enérgicamente.

Por el contrario, se podría señalar que existen contracciones uterinas, no percibidas por la madre, bastante antes del parto, en el curso de los dos últimos meses del embarazo, y que esas contracciones, en una óptica finalista, podrían desempeñar un papel de estimulación sensorial cutánea.

De modo más verosímil, se puede admitir sin duda alguna que el ser humano ha alcanzado un grado de desarrollo tal en la evolución animal que su cría no necesita esas estimulaciones cutáneas para asegurar el buen funcionamiento de sus órganos después del nacimiento. De hecho, parece que sea sobre todo en los mamíferos inferiores donde dichas estimulaciones cutáneas revisten una importancia primordial.

sábado, 13 de agosto de 2011

TET - Transferencia de embrión a trompas


TET (Transferencia de embrión a trompas)

Lo único que diferencia a un TET de un PROST es un factor temporal. Mientras que en el PROST los embriones son colocados como pronúcleo a las 24 horas de la fecundación, en el TET se transfieren con características bien definidas a las 48 horas de haberse fecundado.

Los otros aspectos, como el método de realización, los casos en que se realiza y las probabilidades de éxito, son idénticas al PROST.

viernes, 12 de agosto de 2011

Maternaje y lameteo


Las actitudes que sustituyen al lameteo

Son poco conocidas las costumbres de ciertos mamíferos difíciles de observar, como los mamíferos marinos, por ejemplo. No obstante, se sabe que la madre prodiga a su hijo, después del nacimiento, frecuentes contactos cutáneos, una especie de caricias.

También aquí esos contactos cutáneos parecen tener un efecto estimulante, y un importante papel para el completo desarrollo del recién nacido.

Por el contrario, conocemos bien las costumbres de los grandes simios. En ellos el lameteo es reemplazado por lo que se denomina grooming (del inglés to groom: almohazar, acariciar a un caballo, prodigar atentos cuidados a un animal, sobre todo frotándolo y acariciándolo). La madre proporciona a su hijo recién nacido múltiples contactos cutáneos, en forma de caricias, masaje, manipulaciones, despiojamiento, etc.

Ha sido demostrado científicamente, por medio de observaciones y experimentaciones, que el monito siente una imperiosa necesidad de esos contactos con su madre, de su calor, de sus pelos, de su piel, de ser manipulado y llevado por ella en brazos o sobre la espalda.

Vemos así que incluso en los grandes simios, que no lamen a sus crías, existe la necesidad de estrecho contacto cutáneo entre madre e hijo, necesidad que es satisfecha con el grooming, actitud característica de las hembras hacia sus crías.

Los contactos táctiles juegan pues un pape! primordial en el maternaje de los primates, tal como lo juegan, bajo otras formas, en todos los mamíferos.

Como dice Montagu, parece haber habido una evolución del maternaje paralela a la evolución de las especies, desde el lameteo de los mamíferos inferiores, pasando por la «roedura» de los lemúridos (se sirven de sus dientes para acicalar), hasta el grooming con las manos y los dedos de los monos superiores más evolucionados.

Y el hombre, que se halla en la cima de la pirámide evolutiva, ¿a qué nivel se encuentra en lo que concierne al maternaje?

jueves, 11 de agosto de 2011

Micromanipulación - SUZI


INSEMINACION SUBZONA PELUCIDA (SUZI)

Es una estrategia sofisticada de micromanipulación que consiste en colocar con el microcapilar una cantidad de espermatozoides seleccionados por debajo de la zona pelúcida, es decir en el espacio perivitelino.

Este tipo de inseminación fue concebida para los pacientes que no han logrado la fecundación en cíelos previos de fertilización asistida o en parejas donde el hombre posee un número de espermatozoides aún más bajo que el requerido para la PZD.

El proceso involucra la selección de los espermatozoides de mejor movilidad y su inserción directamente bajo la zona pelúcida. La barreras del cumulus y la zona son franqueadas y se deja que los espermatozoides penetren solamente la membrana del óvulo por medios naturales.

martes, 9 de agosto de 2011

PROST - Pronucleo en Trompas


PROST (Transferencia de pronucleo a trompas)

Este procedimiento consiste en sacar los óvulos y espermatozoides, para fertilizarlos fuera del cuerpo, y luego transferirlos como en el GIFT a las trompas.

La diferencia con aquel método es que en él se pasaban óvulos y esperma, mientras que en el PROST se transfiere a las 24 horas un embrión en estado de pronúcleo (apenas se intercambiaron los cromosomas, pero no se han producido las divisiones de las células embrionarias). Con ayuda de una ecografía se sacan los óvulos y, 24 horas más tarde, se colocan los embriones por medio de una laparoscopía con anestesia general.

• ¿En qué casos se utiliza? Cuando la mujer está completamente sana pero el hombre tiene un problema espermático y se duda de su capacidad fertilizante,

• ¿Qué probabilidades de éxito tiene? Un treinta por ciento aproximadamente, según las estadísticas internacionales, que puede determinarse a los 12 días de realizada la transferencia.

domingo, 7 de agosto de 2011

Conclusiones de la Maternidad en la Naturaleza


1. En los mamíferos, la cría se beneficia tras su nacimiento de un período de «maternaje» caracterizado por una hiperprotección y una dependencia total. Muy poco después es sometida a la educación del padre o de la madre, con una integración rápida en el mundo de los adultos. La educación concluye con la entrada en la edad adulta, que se realiza precozmente desde la pubertad, y que se caracteriza por la ruptura total de los lazos familiares, adquiriendo en ese momento el individuo una autonomía absoluta.

2. Durante la mayor parte de su historia, la humanidad educó a sus hijos siguiendo un modelo semejante al de los mamíferos. Entonces no había ni juventud rebelde ni conflicto generacional.

3. A partir del siglo XIX, la influencia creciente de la familia y de la educación obligatoria alejaron progresivamente la educación del niño del modelo animal. Fue cuando aparecieron los primeros problemas juveniles o educacionales.

4. Tomando conciencia de esos problemas, la sociedad contemporánea, en lugar de dar marcha atrás, acentuó la diferencia con el modelo animal para llegar, en nuestra época, a hacer exactamente lo contrario: supresión del maternaje, hiperprotección del niño más mayorcito y del adolescente, retroceso progresivo de la entrada real en la vida adulta... Paralelamente al desarrollo de esa actitud, se puede ver cómo, se multiplican los problemas de la juventud y la adolescencia, pudiendo desembocar en grandes explosiones de cólera, como en el caso de los campus norteamericanos o el mayo francés.

5. Sólo el abandono de esa conducta nefasta, que ha demostrado ampliamente su carácter peligroso e ineficaz —a pesar de su constante pujanza—, en favor de una vuelta al modelo natural, más acorde con la naturaleza profunda del ser humano, podrá aportar una solución a los problemas que plantean en la actualidad la educación de los niños y la neurosis de los adultos.

viernes, 5 de agosto de 2011

Micromanipulación - PZD


DISECCION PARCIAL DE ZONA (PZD)

Consiste en realizar una pequeña incisión en la zona pelúcida del ovocito (su cascara) para facilitar el ingreso posterior de los espermatozoides al interior del óvulo.

A los ovocitos se los separa de las células que lo rodean y se los ubica en una solución que,produce su retracción. Esto hace que el espacio entre la zona y el óvulo se agrande, facilitando al embriólogo un manejo cuidadoso de la zona sin riesgo de tocar el óvulo, que es mantenido quieto utilizando una micropipeta.

Luego se realiza la disección de la zona con la microaguja y, seguidamente, los óvulos son transferidos a un medio de cultivo inseminados y examinados para verificar la fertilización al día siguiente, aunque no todos reúnen las condiciones ideales.

miércoles, 3 de agosto de 2011

GIFT - Gametos en Trompas de Falopio


GIFT (Transferencia de gametos en trompas de falopio)

Este procedimiento se caracteriza por extraer los óvulos y unirlos con los espermatozoides, previamente tratados, en una cánula que se transferirá por medio de una laparoscopía (dura entre 20 y 30 minutos) dentro de una o de las dos trompas.

Así se asegura que tanto el óvulo como el esperma estén en el lugar Indicado para que fisiológicamente se produzca la fertilización.

•¿En qué casos se utiliza?

- En pacientes que tengan, por lo menos, una trompa absolutamente sana.

- Ante enfermedades masculinas no tan graves, como puede ser contar con una calidad adecuada pero deficiente de espermatozoides para esperar un embarazo con técnicas menos complejas.

- Cuando hay factores Inmuno-lógicos en el moco cervical que impiden el pasaje del esperma.

• ¿Qué probabilidades de éxito tiene? Entre un 25 y un 30 por ciento de las parejas que Intentan alcanzar la gestación con este método lo consiguen. Alrededor de 12 días después de realizada la transferencia puede determinarse el resultado del intento.

martes, 2 de agosto de 2011

La Comunicación del Bebé


La medicina empieza a estudiar científicamente ese medio de comunicación del bebé: los gritos. En efecto, médicos norteamericanos y escandinavos han efectuado centenares y centenares de grabaciones de gritos de lactantes. Esos complejos estudios les han permitido distinguir varios tipos de gritos: el grito del nacimiento (obligatorio y que causa el despliegue de los alvéolos pulmonares), los gritos de dolor, gritos de hambre e incluso gritos de alegría.

Dichos investigadores comienzan incluso a distinguir los gritos del niño normal de los del niño enfermo, a partir de ciertas características del grito (duración, intensidad del sonido, tiempo de inspiración o espiración, etcétera).

Todas esas investigaciones, así como los progresos realizados, demuestran que el grito es una llamada, el esbozo de una comunicación. Comunicación imperfecta en alto grado, ciertamente, pero la única posible. Los amos atentos saben reconocer entonaciones y sentimientos distintos en el ladrido de su perro. Teniendo en cuenta además su inteligencia, es fácil imaginar la complejidad del mensaje que el bebé puede transmitir en su grito.

Así pues, señores pediatras, dejen de creer que el bebé grita para molestar a sus padres.

El más célebre de los pediatras actuales, el doctor Bruno Bettel-heim, ha resumido perfectamente en un ejemplo lo que yo quiero decir: «... un niño llora por la noche y los padres, turbado su sueño, están furiosos, exasperados. De pronto, se les ocurre tomarle la temperatura al bebé; tiene una elevada fiebre. De inmediato desaparece el furor de los padres, y soportan muy bien los gritos que un instante antes les exasperaban. ¿Por qué? Porque sus gritos han adquirido sentido».

El problema radica pues en comprender lo que quiere decir el niño, y en asimilar en cualquier caso que sus gritos tienen un sentido, quieren decir algo, constituyen una llamada. No es culpa suya si esa llamada no es muy clara (tampoco la comunicación es mucho más fácil entre los adultos, a pesar del uso de la palabra...).

Nos toca a nosotros, los adultos, tratar de comprender al bebé y, como mínimo, responder a su llamada. El timbre de la habitación del operado no indica al sonar la razón por la que llama el enfermo, sino tan sólo que lo hace, y eso basta para que la enfermera acuda de inmediato.

domingo, 31 de julio de 2011

FIV - Fertilización in vitro


FIV (Fertilización in vitro)

Se fundamenta en la unión del óvulo y el espermatozoide fuera del cuerpo materno, en una cápsula especial denominada vulgarmente probeta.

La misma es colocada dentro de un sistema que imita todas las temperaturas y gases que tiene el cuerpo humano y los combina con un líquido similar a los que se encuentran dentro de las trompas de Falopio. Más tarde, en un tiempo determinado que puede estar comprendido entre las 18 y las 24 horas, se produce la unión del óvulo y el esperma (fecundación), origen del embrión que luego será transferido al útero.

• ¿En qué casos se utiliza?

- Cuando, por lesiones tubáricas en ambas trompas o por la ausencia de las mismas, el óvulo no puede ponerse en contacto con el espermatozoide.

- Cuando hay incompatibilidad inmunológica extrema entre el moco vaginal de la mujer y el semen, lo que impide el pasaje del esperma al útero.

- Cuando se presentan síntomas de endometriosis en mujeres que ya fueron tratadas pero la enfermedad volvió a aparecer con tanta rapidez que no les dio tiempo